La policía de Tailandia ha comparecido este martes 15 de agosto ante los medios en una caótica rueda de prensa para esclarecer algunos detalles relativos al asesinato del cirujano colombiano Edwin Arrieta (44 años) a manos de Daniel Sancho (29 años). Los investigadores son firmes, el joven chef español acabó con la vida de Arrieta "para acabar con la relación que mantenían" y lo hizo completamente solo, ya que solo se han encontrado restos de ADN de ellos dos en la escena del crimen. Además, sostienen que "empleó un cuchillo y una sierra" para descuartizar el cuerpo una vez muerto, objetos que adquirió tal y como se pudo ver en las grabaciones del supermercado unos días antes.
Sobre la forma en la que murió el colombiano. Daniel confesó en un primer momento que había sido a consecuencia de un fuerte golpe con la bañera en medio de una discusión, algo que los investigadores descartan por completo. "Edwin murió por una puñalada en el pecho", expresan al mismo tiempo que detallan que hay un agujero en la camisa de la víctima que corresponde a una puñalada en la parte derecha del cuerpo.
Antes de dar por concluida su intervención ante los medios, Big Joke, el policía jefe que lleva a cabo la investigación, ha acusado directamente a Sancho de "asesinato premeditado". "No fue un accidente, fue un asesinato premeditado porque antes planeó comprar el material", han revelado al mismo tiempo que mostraban imágenes de algunos de los objetos que Sancho necesitó para llevar a cabo su macabro plan.
Los investigadores han recordado que en Tailandia este tipo de acusaciones acarrean la pena capital. Eso sí, no se trata de una acusación determinante ya que todo dependerá del desarrollo del juicio, que presumiblemente se desarrollará a partir del próximo mes de septiembre.
De ser así, sería un suceso sin precedentes y es que hasta ahora ninguna persona extranjera había sido sometida a la pena de muerte por grave que fuera el caso. De hecho, en la mayoría de los casos se conmuta por la cadena perpetua, lo que llevaría a Daniel a permanecer en una prisión tailandesa el resto de su vida si no se acepta la extradición a nuestro país, tal y como es el deseo de su familia.
En prisión provisional desde el pasado 7 de agosto, Daniel Sancho se enfrentará a un juicio que presumiblemente tendrá lugar a lo largo del mes de septiembre. Tal y como informa 'El Periódico', la instrucción continúa, y se prevé que la defensa de Daniel Sancho reclame nuevas diligencias para intentar dar la vuelta al caso.
Rodolfo Sancho toma una drástica decisión
Al igual que el resto de españoles, la caótica comparecencia de la policía tailandesa ante los medios ha pillado a toda su familia en casa, quienes a buen seguro lo han seguido en directo para conocer de primera mano el futuro que le espera a Daniel.
Horas antes de este día clave en lo relativo al futuro incierto de su hijo, el actor emitía un nuevo comunicado donde anunciaba a través de sus portavoces que no habrá ninguna información "hasta que no se produzca el cese definitivo de la totalidad de medios de comunicación en el domicilio, y sus inmediaciones". La presión mediática a la que se está viendo sometida el actor desde hace más de una semana está afectando a la tranquilidad de su familia, concretamente de su hija pequeña, y no lo piensa permitir. "Dicha presencia alteran la vida de una menor que nada tiene que saber de la situación por la que está atravesando su padre", concluye el texto haciendo referencia a Jimena, la hija que Rodolfo tiene con la también actriz Xenia Tostado.
Daniel Sancho sufre un importante "bajón anímico" en prisión: Así es su día a día en Koh Samui
En prisión preventiva desde el pasado lunes 7 de agosto, estaba previsto que Daniel Sancho abandonara el módulo hospitalario en el que se encuentra para cumplir 10 días de aislamiento por protocolo anti-covid. Sin embargo, ante el riesgo de suicidio o que sufra una agresión por parte de otros presos se ha determinado que siga en este módulo, al menos durante los próximos días.
En un primer momento, sorprendió la tranquilidad y aparente frialdad de Daniel al hablar del macabro asesinato, pero una vez en prisión ha sufrido un importante "bajón anímico". Así lo confesaba el director de la prisión que además apuntaba a que el joven había pedido ansiolíticos para dormir. Al margen de esto, el hijo de Rodolfo Sancho pasa gran parte del día haciendo yoga y leyendo.
“Daniel estaba amenazado y lo vamos a demostrar”, ha asegurado la criminóloga y portavoz de la familia Sancho, Carmen Balfagón, quien desde el principio ha apuntado que hay numerosas "piezas que no encajan" y una gran cantidad de pruebas “contaminadas” en el marco de la investigación que en España no tendrían ninguna validez.