Si había un tema por el que creaba expectación la conversación, a él no le gusta llamarlo entrevista, entre Risto Mejide (48 años) y Máximo Huerta (51 años), era todo lo relacionado a su nombramiento en 2018 como Ministro de Deportes del gobierno de Pedro Sánchez que solo duró siete días, y pese a que han hablado sobre ello largo y tendido, finalmente su relación con su madre ha sido el eje central del espacio televisivo.
Instalados con el famoso sofá en Buñol, la ciudad donde Máximo creció y donde ha vuelto a vivir para cuidar a su madre, ha confesado que su infancia fue muy dura, estuvo marcada por los malos hábitos de su padre, por sus dificultades para hacer amigos en el colegio y por su apego a su madre. Ahora, lo último no ha cambiado, le ha dedicado prácticamente su último libro, ‘Adiós, pequeño’, y dice sin lugar a dudas que siempre fue su cuidador, él fue el apoyo de su padre y ahora, que ella está enferma, lo es más todavía.
Máximo dejó todo para cuidar a su madre
“Durante un viaje en coche mi madre dijo ‘me tiro’ y yo le dije ‘si te tiras tú me tiro yo’” recuerda con lagrimas en los ojos. Y, sin embargo, ahora que está enferma cree que no está preparada para irse, ni él para despedirla: “Estamos a la espera de una operación del tumor otra vez, eso la hace débil, inestable, colérica, tirana, débil, una niña… Mi madre es una señora con problemas y consciente de que la vida… Tiene un miedo a irse horroroso. Y ella no sabe que yo tengo más miedo que ella. Cuánto nos está costando morirnos a los dos, le digo a veces”.
Y a pesar de todo, siente que en gran parte la cuida por egoísmo: “Yo estoy cuidando de mi madre y he renunciado a muchas cosas. Por ello no me doy golpes de pecho, pero creo que hay que hacerlo. La cuido porque yo no me puedo quedar con la sensación de “no hice suficiente”. Y eso sí que es egoísmo. Lo hago porque quiero quedarme tranquilo y feliz. He tenido que dejar Madrid, trabajos, no irme de viaje con mi pareja… Lo hago por ella y por mí, por los dos” decía con lágrimas en los ojos.
Pedro Sánchez le ofreció un cargo después de dimitir
Otro tema del que también le ha costado mucho hablar es de lo que ocurrió después de dimitir como Ministro de Deporte, pues dice que no ha sido hasta hace muy poco que ha logrado hablar de ello tranquilo o bromear sobre lo ocurrido. Pero es más, ha hecho pública una llamada de Pedro Sánchez que tuvo lugar un mes después de que dimitiera del cargo por haber tenido una deuda con Hacienda doce años antes, en la que le ofrecía un cargo en el Instituto Cervantes. Él no lo aceptó, dice que no estaba preparado porque le costó mucho reponerse de lo que ocurrió, aunque admite que como escritor es algo que le hubiera encantado hacer. No llegó la oportunidad en el momento adecuado.