Màxim Huerta se funde en un abrazo con su madre tras tomar posesión de su cartera de ministro

El nuevo ministro de Cultura y Deporte, visiblemente emocionado, ha descrito la jornada como "un día de emoción, inseguridades y vértigo"

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El cambio de cartera en el Ministerio de Cultura ha sido de los más emocionantes que se recuerdan. La Casa de los Heros, edificio en el que se encuentra su sede central, estaba lleno hasta la bandera. Nadie quería perderse cómo Màxim Huerta tomaba el relevo de Íñigo Méndez de Vigo. Tras prometer su cargo con el resto de ministros del gobierno de Pedro Sánchez, Màxim, ya con cartera, daba su primer discurso como miembro del nuevo Ejecutivo.

El escritor ha descrito esta significativa jornada como "un día de ilusión, nervios, inseguridades y vértigo" y ha expresado sentirse "muy orgulloso" de su nueva responsabilidad para con el gobierno de España. Huerta se ha comprometido a "recuperar" el Ministerio de Cultura y hacer que la cultura y el deporte sean "accesibles para todos". Sus palabras han sido abiertamente evocadoras cuando se ha referido a la materia de a que se va a hacer cargo: "La cultura somos nosotros, somos el traje que nos hemos puesto, la película que hemos visto, el libro que hemos leído, la música que nos ha acompañado en el taxi, el museo en el que hemos entrado y el aplauso en el campo de deportes al que hemos asistido.Todos somos consecuencias de un montón de acontecimientos culturales".

Desde 'El programa de AR', Ana Rosa Quintana junto al resto de sus excompañeros atendían en un silencio emocionado sus palabras y cada uno de sus gestos.

Después de su turno de palabra y agradecer a su predecesor el traspaso de poderes, ha corrido a saludar a los familiares y amigos que han querido arroparle en este momento capital de su vida. Especialmente emocionante ha sido el abrazo en el que se ha fundido con su madre, Clara Hernández, quien no ha podido reprimir las lágrimas. "La cuida muchísimo y se ocupa mucho de ella", afirmaba Quintana desde plató.

Clara se ha convertido en el pilar más importante de la vida de Màxim, después de que la pérdida de su padre, que fallecía en septiembre del año pasado a causa del alzheimer, supusiera uno de los golpes más duros de su vida.

Màxim no ha querido dejar pasar la ocasión de agradecerles personalmente a sus grandes amigos Marta Fernández, Alejandro Melero y Paco Tomás, haber estado ahí con él.