Kiko Matamoros se sometió ayer a una operación estética. El colaborador llegó a su clínica de confianza para realizarse una marcación abdominal, un retoque que llevaba mucho tiempo esperando hacerse. En todo momento estuvo acompañado por Marta López Álamo, que cada vez que su novio lleva a cabo alguna intervención de este tipo, no se separa de su lado. Y no solo durante el día de la operación. La modelo se ha convertido en la compañera más fiel de Kiko e incluso hace sacrificios con tal de permanecer con él durante su recuperación. Ella misma ha contado hoy cuál de sus planes ha tenido que aplazar con la intención de estar junto a Kiko en estos días de post operatorio.
Marta López Álamo, desde casa, ha contado a sus seguidores que en los próximos días va a pasar bastante tiempo en casa para estar al lado de Kiko Matamoros. Esta operación del colaborador ha coincidido con el viaje a Milán que la modelo tenía planeado, pero no ha dudado en aplazarlo hasta septiembre por esta coincidencia que hace que Kiko no esté al cien por cien en estos días. “Debería estar en Milán, pero lo pospuse a septiembre para estar con él”, ha escrito para explicar la razón por la que no ha hecho las maletas. Lejos de lamentarse, Marta ha sacado su lado más optimista y ha comentado que “aprovecharé para grabar cositas y hacer el curso de nutrición”.
Además, ha aprovechado su publicación en Instagram para dar la última hora del estado de salud de Kiko Matamoros. La modelo ha asegurado que el colaborador ha pasado muy buena noche, incluso mejor de lo que creían en un principio. Marta López Álamo también ha afirmado que Kiko está feliz y al fin y al cabo esa es una de las cuestiones más importantes para ella.