No puede más. Literalmente. María Patiño ha llegado al punto sin retorno. La colaboradora está muy cansada de los jueguecitos que hacen con ella los responsables de las cámaras de Sálvame. No es la primera vez que le ocurre pero parece que ya llega la definitiva. De repente, una imagen terrible aparecía en el pantallón y la colaboradora cambiaba la cara. ¿Otra vez? Patiño da un golpe sobre la mesa...
“Es alucinante”. María Patiño no daba crédito a lo que se estaba emitiendo. Una imagen en bucle de ella misma poniendo una cara que nunca antes habíamos visto. De nuevo, la colaboradora se convertía en el blanco perfecto de la realización de Sálvame. La cúpula, de nuevo, contraatacando. ¿Por qué la tienen tomada con la presentadora de Socialité? “Hay alguien que me quiere destruir”, afirmaba con rotundidad.
Jorge Javier trataba de limar asperezas pero no lo conseguía. María ya se ha tenido que enfrentar en varias ocasiones a estas locuras visuales que se empeñan en hacerle. De hecho, la propia colaboradora llegó un momento que se quitó los zapatos y trepó hasta la parte de arriba del plató para encararse con los encargados de la realización. Estos, claro, viéndola venir, no le abrieron la puerta pero Patiño no se quedó con las ganas.
Esta vez ha preferido aguantarse, pasar el mal trago y dejar que todo continuase como si nada. No le ha resultado fácil. Aunque el enfrentamiento con Mila Ximénez hacía que tuviese que entregarse a otros menesteres.