María Patiño (51 años) disfruta de su vida en Madrid, junto con su esposo Ricardo Rodríguez y su hijo, en un espectacular piso alquilado. Sin embargo, hay un único rincón en el mundo donde encuentra en una paz profunda: Fuerteventura. "Desde que perdí a mis padres, tomé la decisión de vivir el presente y no planificar el futuro. Llegaste tú, Fuerteventura y me enamoraste. Somos muy parecidas, salvajes, solitarias y universales. Ya me perteneces de por vida" Este lugar paradisíaco se ha convertido en su refugio personal, tanto es así que allí posee su primera y única vivienda en propiedad.
El pasado año, María Patiño y su marido tomaron una audaz decisión al invertir más de medio millón de euros en un encantador chalé ubicado en segunda línea de playa, en la turística zona de Corralejo en Fuerteventura. La propiedad cuenta con una generosa superficie de 229 metros cuadrados, y la pareja disfruta al máximo de cada rincón de la casa. Sin embargo, han optado por alquilar una parte del chalé, unos 100 metros cuadrados, durante el verano para sacarle provecho económicamente. De esta manera, María puede mantener su ansiado refugio isleño y seguir disfrutando de él durante la temporada estival.
Este negocio se ha convertido en el "plan B" de la presentadora, una solución financiera tras el final de los programas 'Sálvame' y 'Sálvame Deluxe'. La decisión ha sido un verdadero acierto, como se ha podido apreciar a través de sus redes sociales, y ha sido todo un éxito, ya que el chalé ha estado completamente ocupado durante todas las semanas restantes del verano. Aunque no sea posible disfrutar de unas vacaciones en el retiro de María Patiño este verano, queremos mostrarte cada uno de los encantadores rincones de su hogar y te desvelamos lo que cuesta pasar una noche en este paraíso. ¡Comencemos!
El chalé de María Patiño
El chalé en propiedad de María Patiño y Ricardo Rodríguez promete ser el lugar ideal para disfrutar de unas vacaciones de ensueño junto al mar. Pero, ¿por qué eligieron Fuerteventura? La pareja ha optado por esta isla canaria, la más salvaje de todas, como su refugio en los días de descanso. Ricardo es un apasionado de los deportes acuáticos, especialmente del surf, tal como podemos comprobar en sus publicaciones en Instagram. Por otro lado, María se deleita con las playas paradisiacas de aguas cristalinas. Sin lugar a dudas, el entorno en el que se encuentra el chalé ya lo convierte en un lugar deseado en el que desconectar del ajetreo diario.
La acogedora casa, conocida como Villa Corralejo Bay, se encuentra en la calle Fragata número 8, en la encantadora zona de Corralejo. Esta vivienda se distribuye en dos plantas y tiene tres dormitorios, dos baños y una maravillosa zona exterior con barbacoa, rodeada de palmeras que le confieren un ambiente relajante y tropical. La pareja asegura que es perfecta para ir en familia y con amigos. Eso sí, no tiene piscina.
El precio por noche para alquilar la Villa Corralejo Bay de María Patiño y Ricardo Rodríguez oscila entre 210 y 300 euros, dependiendo de los días de la semana y la temporada. Para reservar esta casa, es necesario cumplir con ciertos requisitos. La estancia mínima es de tres noches. Además, se solicita una fianza reembolsable de 400 euros, que deberá ser abonada al momento de la llegada al alojamiento. Según el portal de alquiler Booking, se realizará una retención en la tarjeta de los huéspedes, y esta será devuelta en su totalidad 7 días después de la salida, siempre y cuando no se hayan producido desperfectos o incidencias durante la estancia.
Es importante tener en cuenta que en el interior de la villa no está permitido fumar y, asimismo, se informa que no se admiten mascotas en la propiedad.
Así es la casa de Fuerteventura de María Patiño
En la planta baja de Villa Corralejo Bay está el acogedor salón, una cocina bien equipada, dos dormitorios y un aseo. La planta superior destaca por su encanto especial, ya que cuenta con otro dormitorio que da a una espaciosa terraza. Desde este rincón privilegiado, los huéspedes pueden deleitarse con impresionantes vistas panorámicas hacia la Isla de Lobos, un espacio natural protegido muy apreciado y visitado por turistas.
Sin duda, la zona exterior de la Villa Corralejo Bay es uno de sus puntos más destacados. En primer lugar, la zona de comedor exterior se presenta como un espacio perfecto para reunirse y disfrutar de comidas al aire libre al contar con una amplia mesa de madera junto a la barbacoa. La segunda área, con césped y cómodas tumbonas estilo chill-out, brinda un rincón ideal para relajarse y desconectar. Por último, en la planta superior, hay otra zona pensada para tomar el sol y descansar.
El salón de la casa destaca por su alegre y vibrante decoración. Los colores llamativos toman protagonismo en este espacio, creando una atmósfera llena de vida y energía. El toque retro y vintage se aprecia en los muebles de madera revestidos con pintura blanca, lo que aporta un encanto especial a la estancia. Una mesa de comedor redonda, rodeada de cuatro sillas de madera con cojines en un cautivador tono azul turquesa, completa el salón.
A pesar de su pequeño tamaño, la cocina de la Villa Corralejo Bay está perfectamente equipada con todo lo necesario para preparar deliciosas comidas durante las vacaciones. La combinación de materiales como el mármol y el metal junto con la calidez de la madera crea un estilo chic y moderno que está en tendencia. Además,es semiabierta al salón-comedor, lo que contribuye a una sensación de mayor amplitud y fluidez en el espacio.
Los tres dormitorios de la Villa Corralejo Bay ofrecen una variedad de estilos sencillos y distintivos. Uno de ellos está equipado con una cómoda cama de matrimonio, mientras que los otros dos cuentan con dos camas individuales cada uno. La pareja ha optado por una decoración diferenciada en cada habitación, añadiendo personalidad a cada espacio.
El baño de la casa está diseñado con azulejos en una bonita tonalidad de azul verdoso. Esta elección de color crea una atmósfera fresca y relajante, perfecta para disfrutar de momentos de tranquilidad. El baño cuenta con una ducha, un lavamanos y un gran espejo rectangular, mostrando una sencillez funcional que complementa a la perfección el diseño general de la casa.