Si hay alguien especial en la vida de Sofía Suescun, esa es su madre, Maite Galdeano. La ex gran hermana apoya incondicionalmente a su pequeña y está siempre ahí para lo que necesite. De hecho, tienen una relación que podría ser directamente de hermanas o amigas. La orgullosa progenitora entraba en directo en Sálvame para explicar cómo habían vivido la victoria de Sofía y, de paso, confesar qué le gustaría hacer con parte del dinero del premio...
Hemos echado mucho de menos a Maite Galdeano en los platós de Supervivientes. La ex gran hermana no podía trasladarse hasta Madrid por la enfermedad que sufre y prefería ir entrando por teléfono para opinar sobre el concurso que estaba haciendo su hija Sofía. Por suerte, poco a poco, 'la Maite' iba cogiendo protagonismo y no dudaba en enfrentarse a cualquiera que se le pusiera por delante. Sus 'peleas' con la madre de Hugo han marcado gran parte del reality.
Ahora, ya con la victoria de su hija sobre la mesa, Maite entraba en directo en Sálvame para explicar cómo habían vivido las últimas horas. Tras confesar que le hubiese gustado haber estado en la misma habitación que Sofía compartió con Alejandro, la ex gran hermana se animaba incluso a confesarle a Carlota lo que le gustaría hacer ahora que su hija ya ha regresado de la isla. La presentadora le preguntaba qué caprichillo le gustaría que le regalase la exconcursante con el premio.
“Pues es que no soy de caprichos”, explicaba. “Tenemos de todo pero, mira, sabes lo que me gustaría es hacer un crucero con ella”. Maite explicaba que lo había pasado muy mal con su enfermedad. “Habíamos programado un crucero para irnos por todo el mundo pero creo que no va a tener ni tiempo”. ¡Menudo viajazo! Para no tener caprichos en mente, Maite sabía muy bien lo que quería...