Maite Galdeano y Sofía Suescun: Su fuerte conexión con el más allá

En más de una ocasión Maite Galdeano ha hecho alusión a su creencia en el más allá. Que está rodeada de espíritus o que los muertos le ayudan son algunas de las cuestiones sobre las que se ha pronunciado. Como casi siempre, la madre de Sofía Suescun sorprende con sus palabras y creencias. Ahora ha sido su hija la que en la exclusiva que ha concedido a nuestra revista ha hablado de la conexión que mantienen en su familia con el más allá. A la pregunta sobre si su madre hace magia negra, la ganadora de ‘Gran Hermano’ y ‘Supervivientes' ha asegurado que “mi madre tiene muchísimo poder a nivel energético”. Y esto es algo que a Sofía le permite “vivir muy tranquila, estoy blindada, a la persona que va de corazón nunca le va a pasar algo malo".

Una de las anécdotas que nos ha contado la novia de Kiko Jiménez es que Maite Galdeano no encontraba una riñonera y entonces “le llegó el alma. No aparecía y echó una pedazo de maldición a los ladrones. Ahora nos hemos enterado que uno de ellos se cayó de un tercer piso y se partió la pierna. Uno detenido y el otro herido, imagínate la fuerza que tuvieron los muertos, los espíritus”. Por eso asegura que los que hayan tocado las cosas de su madre “están perdidos”.

Aunque ya se sabía que Maite creía mucho en estas cuestiones, Sofía nos ha dado la sorpresa al contar que ella también tiene fuertes creencias. “Creo que hay algo por encima que tiene el control, yo tengo una muy buena energía a mi lado, es un muerto que tengo desde que nací. Me han dicho que no es un familiar, es un señor”. Además relaciona todo esto con el robo que ella y Kiko Jiménez sufrieron tras regresar de sus vacaciones en Ibiza. “Sentía que algo estaba pasando, algo que no era normal. Jamás me había pasado antes. El día anterior al robo, estábamos en Ibiza y me empecé a encontrar fatal. Empecé a vomitar una y otra vez, hasta que me caía por los suelos, no podía mantenerme en pie. No lo entendía, me quería morir. No le encuentro explicación a esa sensación. Sentía que algo estaba pasando, algo que no era normal. Jamás me había pasado antes”, ha contado sobre sus sensaciones justo antes de que los ladrones entraran en su casa.

Sofía ha hablado también de lo que piensa sobre los chamanes africanos. “Mi madre estuvo con algún africano. Son videntes, con sus caracolas, sus sacrificios y los trabajos que mandan hacer a África, matando una vaca. Al final me hicieron creer y sentir que están ahí, ellos pueden mandar el mal a alguien que se lo merece”, ha contado sobre estas experiencias que tanto le han marcado. Sobre algunos de los novios de su madre ha contado algo de lo más curioso. “De pequeña los novios de mi madre me traían unas pócimas para echármelas, estoy protegida. Si alguien me quiere hacer la vida imposible, se le vuelve en contra”, ha contado con total seguridad.