Se nos ha hecho larguísima la ausencia de Lydia Lozano. ¿Cómo enfrentarse a Sálvame sin la presencia de la reina del chuminero? ¿Quién se puede arrancar a bailar en cualquier momento? La colaboradora se cogía unos días libres y se marchaba a Canarias para tostarse al sol. Y así ha sido. Lydia regresaba al que es su plató y sorprendía a todos con su renovado aspecto. Mucho más bronceada y risueña, la colaboradora aterrizaba en Sálvame con ganas y energía...
Kiko Hernández ni siquiera podía concentrarse. El colaborador tenía la mirada puesta en el nuevo aspecto de Lydia Lozano y no conseguía hacer su trabajo. La reina del chuminero brillaba con luz propia y nadie podía obviarlo. ¿Qué se había hecho para tener un estilo tan renovado? La colaboradora se había cogido unos días libres para desconectar del trabajo y sentir los primeros pasos del verano y le había sentado estupendamente.
Lydia venía directa desde Canarias a Sálvame. Más bronceada y con las mechas más californianas que nunca, la colaboradora ni se inmutaba ante los comentarios de sus compañeros. “Un beso para Guimar”, respondía Lydia, muy emocionada por lo bien que se lo había pasado y lo bien que la habían tratado en Canarias. Pocos sitios hay que le gusten más y donde se sienta más en casa. Claro que, ¡cómo para no estar bien en las islas!
Muchos frentes en marcha
Lydia se reincorporaba al programa con numerosos frentes abiertos. La marcha de Antonio Tejado, el problema de Mila Ximénez con la conocida como 'estafadora de la jet set', el supuesto engaño de la pareja de Rafa Mora... Menos mal que Lydia es toda una profesional y no se le escapa nada.