El exseleccionador nacional de fútbol, Luis Enrique, aún llora la muerte de su hija Xana, a consecuencia de un cáncer de huesos, cuando solo contaba con nueve añitos, acaecida el pasado mes de agosto.

El periodista deportivo Julián García Candau ha asegurado que Luis Enrique no ha superado la tragedia, algo que difícilmente se pueda superar nunca, pero que ha encontrado consuelo en el deporte, en especial el ciclismo, al que es muy aficionado. "Sigue saliendo los fines de semana por las carreteras cercanas a su residencia", explica García Candau.

"La desgracia que se cebó en su familia lo convirtió en el ser humano que por su fuerte carácter no parecía. Luis Enrique muestra físicamente el dolor sufrido. Todavía no ha superado la muerte de su hija. Peor lo está pasando aún su esposa", escribe Julián García Candau.