Si en la edición anterior de ‘Supervivientes’ la ración de ‘morrazos’ la puso Yola Berrocal, en esta, lo hace Laura Matamoros, y no porque haya viajado de urgencia un cirujano plástico para dejarle los labios como dos salchichas, no, la culpa la ha tenido una araña.
Hasta ahora, la persona con picadura de arácnido, con permiso de Spiderman, más popular de la televisión era Víctor Sandoval pero eso está por cambiar. La hija de Kiko Matamoros recibió la visita de una araña que no tuvo lugar mejor para morder (sí estas muerden) que en los labios de la concursante. La reacción alérgica fue brutal y a Laura se le triplicó el tamaño de su boca. Un poema, como bien calificaron sus compañeros.
A pesar de lo doloroso de la situación, que fue controlada y volvió a la normalidad, el aspecto de Matamoros causó entre sus compañeros muchas risas al verla con unos morritos tan desproporcionados. Alba estallaba en carcajadas cuando se lo mostraba Laura y exclamaba “¿dónde está esta araña? ¿por qué no me ha picado a mí en los pechos?”. A Paola le encantó la nueva imagen de la hija de la ganadora de GH VIP 4: “¡Esa es una araña profesional, ha hecho un labio perfecto!”.
Finalmente, la boca de Laura, para alivio suyo, volvió a la normalidad, por mucho que Paola opinase que el trabajo de la ‘araña cirujana’ había sido sublime.