Lara Dibildos (51 años) pasa página tras la muerte de su madre, Laura Valenzuela, y disfruta de su primer verano de amor junto a Cándido Conde-Pumpido Varela (42 años), el abogado hijo del actual presidente del Tribunal Constitucional.
La actriz, que cuidó hasta su último aliento a su madre, encontró el amor hace unos meses y ahora disfruta al máximo de las mariposas que siente en el estómago gracias a su novio, con el que ha viajado hasta Tarifa para pasar las vacaciones y donde han sido fotografiados en actitud muy cariñosa. Besos, miradas cómplices, química, largas conversaciones e infinitud de sonrisas, la pareja se sentó en un de los rincones más demandados de la playa de Los Lances, Carbones 13, el chiringuito que regenta Santi Carbones, exmarido de Raquel Meroño, para ver un precioso atardecer.
Muy felices de este tiempo de calidad juntos, en las instantáneas solo puede verse amor y complicidad. Además de dar un precioso paseo por la playa mientras charlaban, Cándido ha demostrado ser todo un caballero y cuando Lara tenía un poco de frío al bajar el sol y le ha tapado con su toalla hasta llegar al chiringuito en el que se han sentado y en el que han podido disfrutar de los últimos rayos de sol mientras se hacían cariñitos y se refrescaban del calor con dos heladoras botellas de agua.
Lara Dibildos, muy cómplice con su novio
Dibildos y Conde-Pumpido Varel pasan por primera vez juntos este periodo estival, lo que hará infinitamente más llevadero el duelo a la intérprete. La pareja se conoció el pasado mes de abril en el enlace de unos amigos en común, tal y como reveló la revista Semana. Desde aquel momento (ya se sabe que de una boda sale otra boda), no se han separado y han sido varios los planes que han podido hacer juntos.
Además, el pasado junio pudieron disfrutar de la buena música del festival musical Love the 90's, celebrado en Madrid; se fueron de viaje a Tánger y Lara acompañó al abogado a la entrega de Premios Toga de Oro a la Excelencia Jurídica, entregados por la Sociedad Europea de Fomento Social y Cultural en la que fue galardonado. "Nos estamos conociendo, pero aún es pronto para saber más", confesó en ese momento a El Español.
Lara deja atrás un amargo periodo y recupera la sonrisa después de que ella, que es hija única, se volcaea en los cuidados de su madre. No se separaba un segundo de su lado y, cuando su salud empeoró y nada se pudo hacer por ella, estuvo acompañándola hasta el final. Dibildos está satisfecha y en paz con la absoluta entrega que le dedicó a su progenitora. No le importó haber dejado de lado su perfil más privado, la mujer que le dio la vida era su prioridad. Ahora que ella ya no está, ha podido recuperar los ratos de ocio junto a su enamorado, un reputadísimo letrado que es uno de los socios fundadores del Despacho Conde-Pumpido & de Porres Abogados, con sede en Madrid y en Málaga.
Lejos de esos meses de estrés y tristeza, Lara, que ha seguido trabajando y haciendo muchos proyectos teatrales (aunque tuvo que bajar el ritmo cuando se ocupaba de su progenitora) ahora dedicará su verano a descansar y a estar junto a su nuevo amor, que le pone ojitos y la cuida mucho como puede verse en las fotografías. Es habitual que ella en los meses de verano se establezca en Marbella; lo que le vendría también muy bien para estar cerca de Cándido Conde-Pumpido, puesto que trabaja a caballo entre Málaga y la capital. Eso sí, estos días en Tarifa están siendo geniales para olvidarse del trabajo y dedicarse un poco más a ellos mismos.
Así se conocieron