Poco a poco, María Pombo se va habituando a la llegada de Martín a casa, una etapa repleta de primeras veces y auténtica revolución que ya ha puesto su vida patas arriba. La influencer era dada de alta el pasado martes, dos días después de dar a luz, y ya ha querido compartir con todos sus seguidores cómo están siendo estos primeros días.
"Primer día en casa superado y hormonas revolucionadas como nunca antes", así empieza un sincero relato que ha acompañado de una preciosa imagen en la que María Pombo posa con el recién nacido mientras las lágrimas brotan de sus ojos.
María Pombo ha dado un sentido a sus lágrimas: "Lloro de felicidad, de cumplir mi gran sueño de ser madre y que este ratón me haya elegido a mi para serlo", escribía todavía con los sentimientos a flor de piel. "También lloro porque echo de menos sentirle en mi tripa y tengo algo de celos de compartirlo", confesaba. "Antes éramos Él y Yo. Él me protegía de todo lo malo, y yo a él, pero a la vez FELIZ como nunca antes de tenerle entre mis brazos".
La influencer no ha ocultado lo "difícil" que están siendo estas primeras horas, sobre todo por esa revolución de hormonas que solo provocan lágrimas en sus ojos: "Ojalá existiera un botón para pausar momentos porque pausaría este para disfrutarlo el doble si cabe".
A diferencia de otras mamás, María recuerda los días en el hospital con especial cariño, como su primera "escapada familiar" y es que era un momento en el que solo existían ellos tres "sin ningún tipo de preocupación". La madrileña se despide con un breve resumen de los infinitos sentimientos que siente en cuestión de minutos: "En fin... lágrimas de post parto, de emoción, de nervios, de cansancio, de celos, de miedo y de auténtica FELICIDAD PLENA que no quiero que acabe nunca".
El orgulloso papá no tardaba en responder a la publicación de su mujer: "Si os quiero más reviento". No cabe duda que el mayor regalo de 2020 ya ha llegado para la familia Castellano Pombo.