Este lunes 13 de febrero, la Academia de Cine de Madrid ha recibido una multitud en peregrinación de rostros conocidos y personalidades de diferentes ámbitos. Todos querían mostrar sus respetos al director Carlos Saura y arropar a su esposa, Eulàlia Ramón, y a dos de sus siete hijos, Antonio y Anna. La huella que deja el autor de 'Peppermint Frappé', que ha fallecido este viernes 10 de febrero a los 91 años, es imborrable y transversal tanto entre los admiradores de su personal cine como en diferentes generaciones de directores de la industria nacional.
Las lágrimas de emoción de Eulàlia, Anna y Antonio, mujer e hijos de Carlos Saura
En la capilla ardiente instalada en la Academia de Cine de Madrid se han vivido momentos de intensa emoción, que la propia viuda y los hijos del autor han querido destacar cuando, más serenos, han atendido a los medios que han cubierto su último adiós. "Se ha ido a lo grande, se lo merecía. Trabajando hasta el último momento, ha hecho un plano muy bonito de su final, y nos está obligando a hacer algo muy bonito por él lo que él hubiese querido", afirmaba Eulàlia Ramón muy emocionada.
Ni ella ni su hija Anna, que también fue musa y representante de su padre, han podido contener las lágrimas ante el impactante y conmovedor estruendo de los tambores de Calanda, que han abierto la capilla ardiente dedicada al director, y que se podrá visitar hasta las 20 horas de este lunes.
"Se fue muy en paz, estuvo lúcido hasta el final"
Ambas mujeres y Antonio, hijo mayor de Carlos Saura y casado con la actriz Ruth Gabriel, fueron también los encargados de subir al escenario del Palacio de Exposiciones y Congresos FIBES de Sevilla para recoger el Goya de Honor con el que la Academia de Cine ha distinguido este año al cineasta. Galardón que había podido recibir unos días antes en la tranquilidad de su casa. "Se fue muy en paz, de una manera muy bonita, estuvo lúcido hasta el final", ha contado Eulàlia este lunes. Sobre todo, ha querido manifestar que a pesar del dolor por su pérdida, el reconocimiento en los Goya y el último adiós de hoy es en realidad un canto a todo lo que aportó Saura a sus vidas, al cine y al Arte, y que le ha acabado trascendiendo: "Aunque estemos muy tristes queremos celebrar la vida que ha tenido. Tantas cosas como nos ha dado, películas, lecciones de vida, de todo, y una lección de fortaleza, dignidad y lucidez hasta el final".
No han faltado amigos y compañeros de profesión que han querido rendir un sentido homenaje al 'maestro' y estar con la familia en estos momentos tan dolorosos. Por la capilla ardiente han pasado Pedro Almodóvar, India Martínez, Nacho Guerreros, Roberto Álvarez, Imanol Arias, Massiel, Pedro Ruiz, Andrés Pajares, Fernando Colomo, Javier Cámara o Daniel Guzman.