El éxito y la fama pueden ser muy peligrosos si no se tiene la cabeza bien asentada, porque se corre el riesgo de convertirse en un juguete roto por culpa del alcohol y las drogas. Y si eso le puede pasar a un adulto, ¿qué no puede pasar con un niño o un adolescente?
La última en reconocerlo ha sido Paris Jackson, hija del Rey del Pop, quien tras haber sobrevivido a un intento de suicidio y varias depresiones, ha reconocido que es alcohólica. Eso sí, está en tratamiento. Cada semana acude a sesiones de Alcohólicos Anónimos. Al menos ha puesto freno a su problema con la bebida. Paris tan solo tiene 17 años, pero ha tenido que lidiar con demasiados problemas para una adolescente, y parece que su manera de escapar de ellos era refugiarse en el alcohol. Ahora sabe que no puede seguir así, pero la presión a la que vive sometida, en parte por las redes sociales, donde todos sus seguidores esperan que los conteste y que tenga dedicación con cada uno de ellos, está consiguiendo en ella un efecto nocivo, puesto que no tiene tiempo para todos. Así que pide comprensión. No quiere decepcionar a nadie, pero desea dejar claro que ella no tiene por qué dar explicaciones. "Despedazaron cada día a mi padre y no pienso permitir que ocurra lo mismo conmigo", dice en Instagram, donde ha revelado su complicada situación. "¿Esperan a que me siente todo el día para responder los mensajes que me deja la gente? Tengo reuniones de AA (Alcohólicos Anónimos) a las que debo acudir. Obligaciones familiares. Asuntos personales...". Solo una adolescente y con una carga demasiado grande sobre su delicada espalda.
Pero no es ni ha sido la única. El viernes 29 de enero, en el programa de entrevistas de Oprah Winfrey, el actor Jeremy Miller (39), famoso por haber interpretado a Ben Shriver en la serie 'Los problemas crecen', realizó una confesión sobrecogedora: "Con 4 años ya bebía alcohol y a los 12 me cogí mi primera borrachera". No es el único de la serie que tuvo problemas, pues su protagonista, Kirk Cameron -todo un ídolo de jovencitas en los años 80- también vivió su propio calvario con las adicciones, afortunadamente resueltas ya. La 'hermana' de Kirk y Ben, la actriz Tracey Gold, padeció anorexia durante su adolescencia, esto es, en la época en la que rodó la serie. Su estado llegó a ser tan grave, que estuvo a punto de morir, pero en 1992, ingresó en una clínica y en la actualidad es una feliz madre de familia con tres hijos.
Volviendo a Jeremy Miller, en la entrevista habló de cómo sus abuelos organizaban fiestas en casa y que, al acabar, él se iba bebiendo los restos de la cerveza que quedaba. Solo tenía 4 añitos. En 2012, decidió hacer público su alcoholismo y, en la actualidad, afirma estar totalmente recuperado.
Pero no solo Jeremy ha sido un niño o un adolescente que ha sido víctima de la fama y ha caído en esta tremenda agonía que, de no poner remedio a tiempo, puede acabar en tragedia. En esta galería os ofrecemos un repaso de actores y actrices que a una edad muy temprana cayeron en ese pozo.