Kiko Rivera fue el invitado sorpresa de la tarde de ayer de ‘Dani y Flo’, donde estos y Lara Álvarez le hicieron saber lo cambiadísimo que estaba a raíz de la reducción de estómago que se sometió hace tres meses. Él, por primera vez en televisión, habló sobre este tema.
“Estoy muy feliz porque últimamente quepo en las sillas de televisión. Antes me daba en todos los lados”, empezaba diciendo en su entrevista. “Estoy muy contento. Fue muy bien la intervención. Ahora como muchísimo menos. Antes me comía seis pizzas, ahora me como cinco… estoy muy feliz”, decía con su habitual guasa. Lo cierto es que la banda gástrica que se hizo poner el hijo de Isabel Pantoja lo que hace no es disminuir el apetito, sino que el paciente coma menos. Al dejar menos espacio en el estómago, uno se sacia antes.
Lo primero en lo que ha notado este cambio ha sido en su salud, además de en su físico. “Me ha bajado el azúcar, estoy muy bien”. Él, como su madre, padece diabetes, por lo que mantener los niveles de azúcar a raya es una bendición. Además de diabético, Kiko también sufre numerosos ataques de gota, que, imaginamos, también se habrán reducido al haber mejorado su salud.
“Mi mujer me lo agradece”; contaba, feliz porque ahora Irene lo “ve más guapo” y porque está más ágil, “ahora puedo correr detrás de mis hijos. Puedo moverme”.
Rivera, que fantaseó con la idea de lanzar un futuro tema en inglés, cuenta que ha bajado tres tallas de pantalón ¡y hasta de zapatos!. “El otro día fui a comprarme unas zapatillas y mi 44 de siempre me quedaba grande”.
Si se arrepiente de una cosa es de no haberlo hecho antes, “he ganado en salud y en imagen. Es lo mejor que hecho en mi vida”.