Kiko Rivera recibe dos alegrías en su peor semana y en plena recuperación del ictus

A Kiko Rivera la vida le ha dado una segunda oportunidad o, al menos, así se siente él después del tremendo susto que se llevó el pasado viernes 21 de octubre cuando tuvo que ser trasladado de urgencia al hospital sevillano Virgen del Rocío. Kiko Rivera sufrió un ictus leve y, tras unos días de pruebas y hospitalización, se recupera en casa junto a su mujer, Irene Rosales, y sus dos hijas, Ana y Carlota. Y si este bache de salud no fuera suficiente, el último revés judicial que ha recibido Kiko no va a ayudarle en su recuperación. Kiko ha perdido la demanda que interpuso a Bibiana, de las Mellis, a la que pedía 150.000 euros. Ahora, el hijo de Isabel Pantoja deberá pagar las costas del juicio.

El ictus, el varapalo judicial y el distanciamiento, una vez más, de Kiko Rivera con su madre, Isabel Pantoja, y su hermana, Isa, no están siendo, desde luego, las mejores condiciones para la tranquilidad que necesita ahora mismo su estado de ánimo.

Pero no todo ha sido malo es esta semana negra que Kiko Rivera no olvidará nunca. Pese a que los médicos le han recomendado mucho reposo y, sobre todo, que cambie ciertos hábitos de vida, Kiko no ha podido resistirse a compartir en sus redes sociales el éxito que está teniendo su último tema, 'Vudú', que ha tenido en estos siete últimos días más de 106.000 reproduccciones en Spotify. "Gracias de todo ❤️. Hoy justo hace una semana que se estreno Vudú y ya suma más de 100 mil reproducciones. Os quiero con el alma 💋", ha escrito Kiko en su cuenta de Instagram.

El éxito del último tema de Kiko Rivera ha sido una de las alegrías en esta semana amarga del hijo de Isabel Pantoja.

No ha sido esta la única alegría que se ha llevado Kiko en estos últimos días. El club de sus amores, el Sevilla FC, en su último partido disputado en el Sánchez Pizjuán, hizo sonar por megafonía, precisamente, la canción 'Vudú', lo que emocionó a Kiko como no se puede uno imaginar. "Soy feliz", escribió en sus stories. Sin duda, un bonito homenaje que el club blanco dedicó a uno de sus más fervientes hinchas.