"Ojalá estuvieses aquí papá. Nada de esto estaría pasando. Tengo miedo de encontrarme con la verdad. Pero voy a luchar hasta el final tumbando a quien haga falta tumbar. Si ellos no supieron respetar tu voluntad, si todavía está en mi mano, te juro por Dios que yo lo haré". Claro, contundente y seguro. Kiko Rivera ha dado un golpe en la mesa contra su madre, Isabel Pantoja, sin precedentes y está dispuesto a esclarecer las verdaderas voluntades de su padre, Francisco Rivera 'Paquirri', fallecido en Pozoblanco (Córdoba) en 1984.
Kiko Rivera ha destapado la caja de los truenos en Lecturas, donde ha concedido una entrevista que ha hecho historia y que, no hay duda, marcará un antes y un después en el clan Pantoja: "Yo no cedí Cantora a mi madre a sabiendas, firmé lo que ella me pidió. He pedido a mis abogados revisar el testamento, me huelo lo peor" es uno de los titulares más sorprendentes que Kiko Rivera ha dado a nuestra colaboradora Mila Ximénez.
Hace exactamente 36 años de la muerte de Paquirri y 33 desde que el periódico 'El País' publicara que la herencia del matador de toros al fin estaba resuelta. Pero, ¿es realmente así? El enfado de Kiko Rivera con su madre Isabel Pantoja deja bastante claro que no y él está dispuesto a luchar por lo que le pertenece y, sobre todo, respetar las últimas voluntades de su progenitor.
Paquirri, según este artículo, dejó para repartir una serie de bienes que alcanzarían los 1.000 millones de pesetas. Un patrimonio que incluía varias explotaciones agrícolas, varios vehículos y embarcaciones, joyas y trajes de luces, además de otros bienes, que se recogieron en un testamento firmado por Paquirri horas antes de su boda con Isabel Pantoja.
Se repartirían entre la tonadillera y su hijo Francisco, su ex mujer Carmina Ordóñez y sus hijos mayores, Francisco y Cayetano, y otra parte para su padre Antonio Rivera y sus hermanos Antonio, José y Teresa. "El acuerdo definitivo otorga el 45% de los bienes de Paquirri, y la finca La Cantora, a su viuda, la tonadillera Isabel Pantoja y a su hijo Francisco José". De esta manera, Pantoja se quedaría con el 51% de Cantora (tasada en 4 millones de euros) y el 49% sería para Kiko.
Aunque todo parecía aclarado la herencia del diestro siempre ha estado envuelta en el misterio y las disputas entre sus beneficiarios nunca han cesado. Los hijos de Carmina Ordóñez siempre han reclamado su parte. Y ahora lo hace Kiko Rivera, y de aquí el inesperado enfrentamiento con su madre que le ha llevado a hablar en exclusiva para Mila Ximénez y nuestra revista. Y ha sido claro: "mi madre me ha engañado".
El dinero de América
En los últimos días se han ido sucediendo una serie de informaciones que han sido el golpe definitivo para el marido de Irene Rosales: "El niño ha sido bueno y ahora ha despertado". Kiko Rivera ha dejado claro en Lecturas que él no cedió Cantora a su madre sino que se fio de ella cuando firmó, pero es que además podría no haber recibido una porción de dinero bastante importante que Paquirri habría dejado en América para sus tres hijos.
Según avanzó Antonio David Flores existiría una gran cantidad de dinero, en torno a un millón de euros de la época, que Paquirri quiso que se repartiera entre sus hijos cuando estos cumplieran 21 años. Un dinero que Kiko nunca recibió.
Francisco y Cayetano
Al morir Paquirri en 1984, su viuda Isabel Pantoja se vio envuelta en un tremendo proceso judicial que terminó por hacer que la tonadillera se ganase la enemistad eterna de la familia del diestro de Barbate, los Rivera, y de la madre de sus hijos mayores, Carmen Ordóñez, que actuó en nombre de los que entonces eran menores de edad para recuperar el lote que Francisco Rivera Pérez había dejado para sus herederos.
Todo fue en vano. Treinta años después de la muerte del torero, Francisco y Cayetano no han recuperado de las manos de Pantoja aquel legado.