La anulación del concierto de Kiko Rivera en Tuilla, Asturias, está trayendo cola. Por una parte, los vecinos del pueblo asturiano, que se encuentra en fiestas, esperaban con ansia la actuación del hijo de Isabel Pantoja, pues ya les había dejado plantados en una ocasión.
El hecho de que a las 3.20 de la madrugada, un representante de la comisión de fiestas anunciara al público asistente, que abarrotaba el recinto, que el concierto de Kiko quedaba anulado indignó y de qué manera a sus fans. Empezaron a abuchearlo y en redes los seguidores de Kiko Rivera se cebaron con él.
Inicialmente, el motivo de la anulación que se hizo público es que Kiko Rivera había sido amenazado y que, ante eso, decidió volverse al hotel. Por más que la concejala de fiestas trató de convencerlo de que cumpliera su contrato, lo cierto es que Kiko no lo hizo, por lo que el ayuntamiendo decidió que no le pagaría el bolo.
Claro que la versión que dió Kiko fue algo distinta. "Había un coche obstaculizando nuestro camino. Se bajó un señor fuera de sí, dando golpes y empujando a la gente. Se acercó al coche y me dijo que si me bajaba me iba a apuñalar. En ese momento, el promotor dijo que nos íbamos", puntualizó.
"Pasé uno de los momentos más malos de mi vida. Recibí amenazas de muerte", aseguraba mientras relataba lo sucedido. Sin querer dejar ningún detalle en el aire, Kiko ha seguido: "Al no realizar mi trabajo yo no tengo que cobrar nada. He pedido perdón a la gente de Asturias que es maravillosa", añadió Kiko.
En redes sociales, sin embargo, los 'haters' siguen dando rienda suelta a su odio y Kiko, que lleva sangre gitana en sus venas por la rama Pantoja, no dudó en echarles una maldición. "Que Dios les dé el doble de lo que me desean. #kikorivera #mentirosatour2019 ❤️❤️❤️❤️". Miedito.