Nadie imaginaba que sería Kiko Rivera quien diera el golpe de efecto definitivo a Isabel Pantoja. El Dj ha repetido en infinidad de ocasiones a lo largo de las últimas semanas que no podrá perdonar "jamás" a su madre después de las mentiras en las que ha vivido a lo largo de toda su vida. El joven es tajante a la hora de reconocer que ni es buena madre y mucho menos buena abuela, declaraciones que se convertían en una flecha directa al corazón de la artista, que se encuentra recluida en Cantora.

"Isabel Pantoja está medicada, no sale de la cama desde el viernes, ha tenido varias crisis de ansiedad durante estos días, no habla con nadie ni con su hermano Agustín, y su entorno está muy preocupado por ella", contaban desde 'El programa de AR'. Una situación extrema de la que Kiko Rivera es consciente, de ahí que esté dispuesto a dar su brazo a torcer con una única y clara condición.