Kiko Matamoros se encuentra en un momento personal un tanto convulso. El colaborador televisivo ha decidido abandonar definitivamente su silla en el Deluxe debido a la intensidad de trabajo que ha tenido durante los últimos meses. El ex de Makoke ha decidido echar el freno por su bienestar, ya que ha llegado a trabajar los siete días de la semana. Además, el distanciamiento con Anita Matamoros le ha vuelto a provocar un enorme bajón: "Creo que tiene difícil solución, creo que cualquier esfuerzo a un acercamiento con mi hija sería un esfuerzo vano, una frustración y un desastre. Restaría, más que sumaría", ha asegurado con los ojos vidriosos y dolido por la situación. Marta López Álamo ha sido señalada durante mucho tiempo como la culpable de que padre e hija no mantengan contacto pero la realidad es que ha estado al lado de Kiko tanto en las buenas como en las malas.
Marta López Álamo ha sido uno de los apoyos más importantes de Kiko Matamoros en todas y cada una de las batallas, tanto personales como profesionales, que ha tenido que librar. Su papel ha sido fundamental y el tertuliano ha querido gritar a los cuarto vientos el amor que siente por ella.
"Gracias por hacerme feliz y allanarme el camino. Te adoro", ha escrito Kiko Matamoros a través de redes sociales. Una publicación a la que Marta López Álamo no ha tardado en reaccionar: "Mi vida, si te quiero más exploto".
Marta López Álamo y Anita Matamoros mantienen una guerra que lejos de llegar a su fin, crece significativamente con el paso de los días. La modelo dejó claro en exclusiva para Lecturas que "Kiko no ha arremetido contra Ana, lo único que ha hecho es defenderme, quiere educar a su hija bien y no consentir actitudes irrespetuosas"...
A la influencer le causa una profunda pena que padre e hija no sean capaces de solucionar sus diferencias y llegar a un entendimiento ya que ambos se quieren con locura... Y si la única manera llevar a cabo esa reconciliación es quitándose del medio, Marta está dispuesta a sacrificarse por ver feliz a Kiko Matamoros.