Tras su dura estancia en el hospital, Kiko Matamoros por fin ha podido poner rumbo a un destino paradisiaco. Desde hace unos días, el colaborador de televisión está disfrutando de unas merecidas vacaciones en compañía de su novia, Marta López Álamo. La pareja se ha marchado a un lugar que han preferido no desvelar. Desde allí, el tertuliano ha entrado en ‘Sálvame’ este jueves 20 de agosto para contar a todos como se encuentra.
Kiko ha confirmado que ambos han puesto rumbo a un destino paradisiaco. Un viaje en el que ha estado en todo momento asesorado por el equipo médico que está llevando su caso. “No me ha dado miedo irme de vacaciones y desde luego he estado asesorado. Es verdad que al médico no le parecía la mejor opción, pero me ha escuchado, me ha entendido, me ha dado los mejores consejos y he estado en contacto con la Embajada de España, de aquí. Está todo previsto por si tuviera algún problema, pero vamos, afortunadamente estoy cada día un poco mejor”, ha asegurado.
El colaborador de ‘Sálvame’, además, ha reconocido el motivo por el que no quiere desvelar el lugar en el que se encuentra disfrutando de estas vacaciones junto a Marta López Álamo. “No quiero decir dónde estoy, quiero estar tranquilo. No quiero que me saquen con el aspecto que tengo”, ha confesado. Así, Kiko ha dejado claro que está muy preocupado con su aspecto después de haber perdido 14 kilos, de los cuales tan solo ha recuperado 200 gramos debido a que no ingiere muchos alimentos: “Como poco porque me quitaron la vesícula”.
Un duro momento en el que, una vez más, Kiko está contando con el apoyo incondicional de Marta, quien le está ayudando en su recuperación. De hecho, es ella la que se encarga de hacerle las curas. “No he tenido ninguna complicación. Me hago mis limpiezas de catéter. Me las hace Marta, que sabe cómo tiene que hacerlo porque se lo explicaron”, ha afirmado muy orgulloso de todo lo que está haciendo su chica por él.