Kiko Matamoros ha vuelto a un plató de televisión 48 días después de la operación de vesícula que tantísimos problemas de salud le ha provocado. Pero es que además este gran bache de salud ha coincidido con una profunda crisis familiar marcada por el distanciamiento del colaborador con su hija Anita Matamoros y la polémica de esta (y Makoke) con su novia, Marta López Álamo.
El colaborador se ha sentado en 'Sábado Deluxe', aún muy delgado y recuperándose tras pasar por quirófano hace solo unos días, con ganas de aclarar unas cuantas cuestiones, pero fundamentalmente con un objetivo: proteger a su pareja. "Me ha dolido el ver sufrir a mi pareja, también me ha dolido, aunque no lo he vivido, si de alguna manera esto ha provocado un daño a mi hija", ha explicado el padre de Laura Matamoros.
Kiko Matamoros ha insistido en que él está acostumbrado a este tipo de guerras, pero no Marta y de ahí lo realmente mal que lo ha pasado. "Estoy acostumbrado a este negocio, pero quien es nuevo y lo vive por primera vez lo hace de otra forma, diría que incluso traumática". Respecto a la comentada entrevista de la modelo a Lecturas, ha sido muy claro: Marta solo ha querido explicarse en su exclusiva, y está en todo su derecho.
"Marta no le ha faltado el respeto ni en público ni en privado a Ana, todo lo contrario. Es más, era una alegría para ella cuando la veía, y siempre departían con amabilidad y sin ningún problema, la justificación de que hay una obsesión de Marta hacia Ana y que le copia es absurda, imposible de racionalizar... Marta ha sido escrupulosa en el trato, atenta, cariñosa...", ha dicho con evidentes ganas de hablar y dar su versión de todo lo ocurrido cara a cara con sus detractores.
El ex marido Makoke ha insistido que él no sacó a la luz este distanciamiento sino la madre de Anita en 'Viva la Vida' y que él siempre ha buscado proteger a su hija. "Quien saca el conejo de la chistera es la madre. Mi hija no tiene ninguna razón y que se hiciera esto público no la deja bien, la deja de malcriada. Que se culpabilice a mi pareja de esa situación es kafkiano, no voy a permitir que se descalifique a mi pareja a causa de mi hija Ana". Y ha terminado contundente: "Quiero muchísimo a mi hija, pero también quiero muchísimo a mi pareja. No voy a permitir que se le arrastre y hagan juicios ridículos, lo voy a permitir nunca (...). Makoke debería decirle a nuestra hija que respete a su padre y a su pareja".