Con un mes de retraso, Kiko Hernández (46 años) y su flamante marido, Fran Antón (42 años), han puesto rumbo a una nueva escapada. El destino elegido ha sido Grecia y su primera parada, la isla de Santorini, una de las islas más visitadas del mar Egeo. "#love #vacaciones #family … se puede pedir más?", ha escrito Kiko en su Instagram junto a una imagen de la pareja en la piscina del hotel en el que se alojan. Kiko abraza a su marido, que, como él, no puede disimular la felicidad de haber unido sus vidas para siempre y haber formado una familia.
Kiko, el hombre más feliz del mundo
Hasta ahora, la pareja no ha podido disfrutar de su luna de miel. La boda, celebrada en Melilla el pasado 16 de septiembre, fue todo un acontecimiento en la ciudad autónoma y de ella os dimos cumplida cuenta en las páginas de la revista Lecturas. Sus compañeras de 'Sálvame' Lydia Lozano, Laura Fa, Marta López y Chelo García-Cortés afirmaron que nunca habían visto a Kiko Hernández tan feliz y era cierto.
Kiko, el hasta entonces gruñón colaborador de 'Sálvame' que se había erigido en el temor de los famosos –incluidos sus propios compañeros– por mor de sus temidos bombazos, se había convertido en un cariñoso y empático personaje muy alejado de aquel cabecilla del llamado 'eje del mal'. La irrupción de Fran Antón le dio un vuelco a la vida de Kiko Hernández y así se lo hicieron notar sus compañeros. Y Kiko está tan feliz que no les lleva la contraria.
Visita a la Virgen del Pilar
Antes de recalar en Grecia, Kiko, Fran y sus dos hijas, Abril y Jimena, de seis años, viajaron a Zaragoza para hacerle una visita a la Virgen del Pilar el pasado 12 de octubre. Tras presenciar la ofrenda floral a la Virgen, una de las hijas firmó en una bandera de España para dejar constancia del paso de la familia por la capital aragonesa en un día tan especial.
Muy pronto, a ser posible el año que viene, Kiko y Fran quieren ver aumentada la familia con un nuevo bebé, un hermanito o hermanita para Abril y Jimena.
Mudanza de Madrid a Melilla
Kiko Hernández y sus dos hijas se han mudado a Melilla, ciudad natal de Fran Antón, donde residirá la familia a partir de ahora. Kiko ha adquirido un ático en un moderno complejo, en la mejor zona de Melilla, que cuenta con una bonita zona comunitaria, con piscina, gimnasio y parque infantil.