Khloé, la pequeña de los Kardashian, posa en la portada de la revista deportiva 'Complex' luciendo culamen, 'brazacos' y abdominales para acallar a aquellos que critican su físico. En la revista, además, habla de su ex Lamar Odom, con quien tuvo un matrimonio y una separación de lo más tormentosos. De paso, nos enseña también su super armario. Y en este no hay lentejuelas ni zapatos Laboutin: solo ropa deportiva.
Los que siguen el reality 'Keeping Up With the Kardashians' y las aventuras y desventuras de Kim y compañía con sus problemas del Primer Mundo, saben que la pequeña de las Ks es la que peor parte se ha llevado en el reparto físico. No debió ser cosa fácil crecer en el ambiente sobreobsesionado por la apariencia que creó Kris Jenner, la matriarca del clan, y que Kim se ha encargado de elevar a la enésima potencia.
Khloé ha vivido toda su vida acomplejada, y los medios americanos (también los trolls de internet) no han ayudado. De ahí que sea una obsesa fatalis del deporte. No es de extrañar, entonces, que esté tocando el cielo con las manos al ser portada del número de verano de 'Complex', una prestigiosa revista americana dedicada exclusivamente al deporte. Como un catálogo del Decathlon pero con papel satinado y ropa de marca.
La obsesión de Khloé con el gimnasio es tal, que tiene un armario de casi cincuenta metros solo de ropa de fitness diseñado por un prestigioso estudio de Los Ángeles que se ha encargado de decorarlo y ordenarlo como si fuera el showroom de alguna marca deportiva de prestigio. Khloé reconoce estar "enamorada de su armario" y dice que se lo enseña a todo el mundo que visita su casa.
Entre prendas de fitness y zapatillas de deporte, la pequeña de las Kardashian tiene hueco para todo tipo de marcas y piezas deportivas. Donde podría vivir una pareja, ella tiene la ropa que se lleva al gimnasio.
Se entiende que la pequeña de las Kardashian se sintió de lo más a gusto entre pesas y se relajó hasta el punto de hablar para la revista de uno de sus temas tabú: su ex Lamar Odom, el jugador de la NBA que durante años la ha vuelto medio loca por culpa de sus adicciones e infidelidades y del que se separó en 2013 pero con el que intenta mantener una relación cordial.
Khloé también habla de la transición de su padrastro, el deportista Bruce Jenner que ahora tiene su propio reality donde las Kardashian hacen cameos de vez en cuando -porque en esta familia todo queda en casa- y del hecho de que su madre, a los 50 años, esté saliendo con un chico de 32.