Como cada jueves, uno de los temas a tratar en la mesa de debate de 'El Hormiguero' son los preparativos de la boda de Tamara Falcó (41 años) e Íñigo Onieva (33 años). La marquesa de Griñón ha revelado que con la confección de su vestido de novia ya en marcha, lo que ahora le preocupa es el tema del baile hasta el punto de que ha terminado cancelando la posibilidad de hacer un baile coordinado tal y como le propusieron sus compañeros. "Es muy complicado", se quejaba.
Nuria Roca (50 años) y Juan del Val (52 años) se interesaban por si los novios bailarán el clásico vals pero Tamara prefirió no dar más detalles y se limitó a decir que "quizás". "Si no hay vals no cuenta como matrimonio", bromeaba el escritor que ha aprovechado la oportunidad para hablar del tenso momento que vivió el día de su boda con Nuria.
"Empezamos a bailar el vals y duré 3 o 4 segundos. En un momento su padre, que ese día estaba muy contento y poco contenido, apareció y me la quitó", recordaba Juan ante la risa de su mujer. "Parecía que se casaba él, había dado clases y todo", apuntaba Nuria. El colaborador ha puntualizado que su suegro le explicó que "había estado preparándose para ese momento. También es verdad que tampoco le cundieron mucho", bromeaba.
Pablo Motos se interesaba por conocer la versión de Nuria, que subrayó todo lo que había contado su marido y es que ella no esperaba que su padre "iba a salir tan precipitado". "Mi padre quería lucirse con sus clases de baile y se lució", manifestaba divertida. "Me quitó del medio pronto ¡Te quiero, Alfredo!", zanjaba Juan.
"La noche de bodas está sobrevalorada"
Esta no ha sido la primera vez que Juan y Nuria han contado anécdotas relativas a su vida privada. Hace unas semanas, abordaron el tema de la noche de bodas, un momento que envuelto bajo la estela de ser algo romántico y apasionado, en su caso nada más lejos de la realidad... "Me tomé algún que otro combinado", reconoció el escritor en 'La Roca' al mismo tiempo que la presentadora recordaba que se lo pasaron tan bien que fueron los últimos en abandonar la celebración.
Si hay algo en lo que ambos coinciden, es que la noche de bodas está "sobrevalorada". "Para eso, está el día anterior y el posterior", manifestaba Juan entre risas, a lo que Nuria puntualizó que "el de después también está sobrevalorado". Tras la boda, que tuvo lugar en Valencia, la pareja disfrutó de una breve escapada a Londres. Si hay algo de lo que se arrepiente la presentadora es de no haber hecho una luna de miel de las de verdad. "No digáis que ya haréis el viaje de bodas... El viaje de bodas nunca se hace. Yo llevo más de 20 años casada y no lo he hecho nunca. Quiero irme a las islas Maldivas desde entonces. Y no he podido ir. Y aquí estoy", explicaba con aflicción.