Mañana, 1 de junio, se cumplen catorce años de la muerte de Rocío Jurado. Desde que la cantante falleció cada año su familia le rinde homenaje en Chipiona, acudiendo al cementerio de la localidad gaditana para ver su estatua y llevarle flores. Esta vez, aunque la situación es complicada debido a la crisis sanitaria, también se ha celebrado este evento tan marcado en el calendario del clan Jurado. Eso sí, ha sido muy diferente a años anteriores en especial por las ausencias que ha habido y por la presencia de Amador Mohedano.
En ocasiones anteriores Amador no ha acudido a esta cita. El hermano de la homenajeada era el gran ausente de esta reunión familiar, entre otros motivos porque Rosa Benito siempre que podía estaba presente. Sin embargo, este año la cuñada de la artista no ha podido estar. El hecho de que actualmente no se pueda viajar entre provinciasha impedido que familiares como Rosa Benito o Gloria Camila, que no suelen fallar a esta cita, no hayan podido estar. Así que en esta ocasión uno de los encargados de depositar las flores en la tumba de la cantante ha sido su hermano.
Que Amador haya acudido ha hecho que se reencuentre con Ortega Cano, con quien llevaba mucho tiempo sin coincidir. El torero ha podido ir a esta cita porque se encuentra pasando el confinamiento en Chipiona junto a su hijo José María. Visiblemente emocionado, Ortega Cano ha llegado al lugar del homenaje acompañado por el hijo que tiene en común con Ana María Aldón. Sin duda esta es una semana repleta de emociones para el torero. Al aniversario de la muerte de la que fuera su mujer, hay que sumar que podrá reencontrarse con Ana María Aldón que el jueves termina su aventura en ‘Supervivientes’.
En todo momento los asistentes al homenaje han respetado las medidas de higiene y seguridad que requiere la situación. De hecho Amador y José, cuando se han encontrado, se han saludado juntando sus codos para evitar rozar sus manos.