Joaquín Torres abandona su conocido chalet tras más de una década junto a Raúl Prieto

El arquitecto Joaquín Torres se despide del chalet en el que ha vivido más de diez años junto a Raúl Prieto

Adrián López
Adrián López

Redactor digital de Lecturas

Joaquín Torres y Raúl Prieto
GTRES

Joaquín Torres (54 años) y Raúl Prieto (48 años) han vivido durante más de diez años en una mansión de ensueño a la que hora dicen adiós. Su enorme hogar ubicado en el barrio Salamanca de Madrid, más concretamente en Núñez de Balboa y cerca de la calle Serrano, se queda totalmente vacío para una nueva familia. Eso sí, el arquitecto confesó que es de las más pequeñas en las que había vivido hasta ahora. Y es que anteriormente estuvo en algunas viviendas de hasta 1.200 metros cuadrado cuando esta no llegaba a los 500. 

"Encontré esta, que tiene 400 metros cuadrados y he descubierto que aunque tengo menos espacio, he ganado en libertad y no dependo tanto del servicio. Tiene salones grandes en los que recibir, una sala de estar muy cómoda, una 'master room' grande y habitación para mis hijos. También cuenta con una buena zona de servicio, porque es el motor del funcionamiento de la casa", contó en 'Expansión' años antes de volver a mudarse. 

Hace unos días que el marido de Raúl Prieto mostró a sus miles de seguidores la casa, que no tiene vecinos, antes de dejarla para siempre. En un vídeo en el que compara la mansión amueblada y completamente vacía, el arquitecto les cuenta a todos lo feliz que ha sido en esta propiedad: "Hoy os abro la puerta de esta maravillosa vivienda por última vez. Hemos vivido aquí durante más de diez años y os la enseño para que veáis la sensación de una casa diseñada por nosotros pero sin decorar".

"Este es el comedor que tantas veces os he mostrado, como montábamos mesas, cómo recibíamos a la gente... Se queda vacío y había una mesa para 16 personas. Había tanta vida y tantas cosas para nuestros amigos. Aquí como en otros muchos lugares de la casa", se despide Joaquín para después ir al "baño de cortesía". "Sigue teniendo las mejores calidades: los pavimentos, las paredes, el diseño del espejo. Aún vacío guarda mucha calidad", dice mientras camina hacia el pasillo que lleva al vestidor.  

Sobre la cocina, Torres destaca una "alfombra cerámica" que crearon en blanco y negro para que fuera con el diseño de la estancia. "Es muy limpia y cómoda para hacer una vida fácil mientras se cena y se cocina, y con amigos. Aunque nosotros hemos sido como cocinillas", reconoce. "El diseño, a pesar de tener todos estos años, está intacto. Y la luz es maravillosa, lo que permite amueblar como cada uno quiera. Es clásica, moderna y atemporal", añade. Eso sí, Joaquín se lamenta y expresa que ahora se siente "vacío". 

La marcha de Joaquín Torres de su casa

"Por muy vacía que esté la casa y que yo me sienta la vida continúa", se lamenta el marido de Prieto mientras enseña los últimos rincones de la espectacular vivienda. "Continuamos en otro lugar que os vamos a enseñar muy pronto. Un hogar donde Raúl y yo comenzaremos una nueva fase, una nueva etapa en la que seguir creciendo como pareja y como seres humanos. Espero que os sorprenda mi nueva vida", concluye emocionado. 

@a_cero Con mucho pesar, dejo atrás una etapa de mi vida marcada por la pérdida de mi madre y la mudanza de la casa donde he criado a mis hijos. Este hogar ha sido testigo de momentos maravillosos y de crecimiento, y aunque es difícil partir, me llevo conmigo esos recuerdos y el amor que compartimos allí. #arquitectura#reforma#piso#diseño#fotografia#fyp#interiordesign#building#duelo#architecture#design#interiores♬ sonido original - A-cero Arquitectura

Una de las cosas que más va a echar de menos Joaquín es la sala de esta porque tiene muchos "libros y espacio para dibujar" en un espacio con un "silencio abrumador". Y es que esta vivienda que parecía un museo porque tenía cientos de espectaculares obras de arte estaba cuidada con mucho mimo. De hecho, según contó Torres en la revista '¡Hola!' esta mansión respondía a la vida que había creado con Raúl en la que les gusta quedar con gente pero en la que nunca perdían calidad.

"Reconozco que es excesiva en su decoración pero yo también lo soy en mi forma de ser y de vivir", explicó en el citado medio. Aunque no sabemos las razones por las que la dejan, el arquitecto explicó que ahora busca en la vida racionalidad, por lo que no quiere que la casa le domine sino ser él quien la domina: "En algunas de ellas me he sentido un esclavo". ¿Será ese el motivo de este nuevo cambio? "Con mucho pesar, dejo atrás una etapa de mi vida marcada por la pérdida de mi madre y la mudanza de la casa donde he criado a mis hijos. Este hogar ha sido testigo de momentos maravillosos y de crecimiento, y aunque es difícil partir, me llevo conmigo esos recuerdos y el amor que compartimos allí", termina diciendo en la publicación. 

La reconciliación de Joaquín Torres y Raúl Prieto

No han sido meses fáciles para la pareja. Después del grave accidente que sufrió el arquitecto, todo su mundo se desmoronó. Torres quería recuperarse y solo pensaba en sí mismo. Por el camino, una crisis con su marido que parecía insalvable. El mismo Joaquín lo habría confesado. Necesitaba tiempo y solo podría dedicárselo a su recuperación. Raúl Prieto, con quien se había casado pocos meses antes, guardaba silencio y se desvivía por él. Poco a poco, todo volvía a la normalidad. Mensajes en redes sociales, alguna aparición y unas aguas más calmadas.

Ahora, la pareja vive un verano de amor. Juntos se han marchado de vacaciones para reconstruir su relación. El arquitecto ya se ha recuperado de sus lesiones y no pueden dejar pasar todo lo que han vivido a lo largo de los años. El camino que recorrieron, sobre todo Torres, para llegar hasta aquí fue difícil. Su aceptación personal, contárselo a sus hijos y luego dar el paso de casarse. Felices y unidos, afrontar lo que les venga con entereza y mucha fuerza. Y también una personalidad arrolladora.