Son vecinos pero han terminado convirtiéndose en algo menos que enemigos. Joaquín Prat y Mónica Hoyos son sinceros y reconocen que el paso de la segunda por GH VIP ha dejado al descubierto cosas del otro que no conocían… y que quizás no ‘adoren’. Prat dijo que “se le había ido la cabeza” a Hoyos, esta le llamó “fan radical”… y todo acabó con una invitación del hijo del icónico presentador a ‘El Programa de Ana Rosa’. Y hoy, al fin, se ha producido el cara a cara.
Mónica se ha quejado de que su adversario verbal apenas le dejaba tiempo para rebatirle y este le ha manifestado por qué cree que Miriam, su némesis, ha sido mejor participante de GH: ha ido a la cara, no a criticado y no ha hecho del concurso algo personal, el principal fallo de Hoyos que esta ha reconocido. “No he sabido separar el relity de mi vida privada, pero soy un ser un humano y no puedo dejar de sentir. No me puedo tomar una poción y dejar de sentir”, se ha excusado. Se la ha considerado una villana en su edición pero lo cierto es que no ha sido nada fácil para ella por lo que estaba en juego, su familia, una familia que ella consideraba unida hasta la irrupción de Miriam. De nuevo, desmiente sentir nada por su ex, Carlos Lozano, salvo desilusión, “yo le apoyé en su concurso y él no lo ha hecho conmigo”, ha reiterado una vez más, después de haber visto los vídeos acumulados en los últimos meses mientras ella estaba de encierro voluntario.