Jesús Manuel vive un momento 'trágame tierra' en 'Sálvame': ¡se le rompe el pantalón!

El colaborador de 'Sálvame' sufrió un percance en directo y no tuvo más remedio que tratar de pasar desapercibido, aunque no lo consiguió...

Jesús Manuel Sálvame

¡Pobrecito! Jesús Manuel tenía que tragar saliva y reponerse después de protagonizar uno de los momentos más 'tierra trágame' de la historia de Sálvame. El colaborador lanzaba un encendido discurso contra Laly Bazán y acababa despertando las risas de sus compañeros. Pero, ¿qué estaba pasando? Tanto fue el ímpetu que le puso que ni se dio cuenta de que llevaba una pequeña parte de su cuerpo al aire. ¡Se le había roto el pantalón! El percance, al menos, solo le costará una prenda nueva...

“Ven, dímelo como si yo fuese Laly Bazán”. ¡Qué mala idea tiene siempre Kiko Hernández! Al colaborador no se le pasa ni una. Jesús Manuel se había levantado de su asiento para dirigirse a la cámara y lanzarle un mensaje a la hermana de Carmen Bazán. “Y ahora, a pasear a los perros”; zanjaba con mirada desafiante. Un clásico de Sálvame que nunca pasa de moda. ¡Cómo nos gustan los enfrentamientos en directo!

Entonces, silencio y unas risas espontáneas. Jesús Manuel miraba desconcertado, sin entender a que venía tanta diversión si había puesto todo su carácter sobre la mesa. Kiko Hernández, muy pillo, se levantaba para parar a su compañero y que las cámaras pudieran captarle bien. Jesús Manual estaba cada vez más confundido. ¿Qué había pasado? Pues que con el fragor de la batalla, el colaborador ¡se había roto el pantalón justo en el culo!

Carlota se apiadaba del pobre J.M. y le susurraba al oído lo que había pasado. Menos mal que el colaborador llevaba una ropa interior bien apañada y, en realidad, tampoco se le veía nada. Vamos, con lo de moda que están los pantalones con agujeros por todos los sitios, parecía que estuviese hecho a propósito. Desde aquí, solicitamos un plus de peligrosidad para los contertulios de Sálvame. Que tan pronto se rompen una prenda como acaban en el suelo por una broma de Paz Padilla.