Que Hugo Sierra e Ivana Icardi están más enamorados que nunca lo saben de aquí a la luna. Desde que volvieron de 'Supervivientes 2020' no se han separado ni para hacerse un retoque estético. La pareja está viviendo una luna de miel constante y, a juzgar por las publicaciones que comparten diariamente, ¡mejor no les puede ir! Primero, se marcharon a Palma de Mallorca a inaugurar las vacaciones de verano y a que la argentina conociera, por fin, a la familia de uruguayo. Ahora, los tortolitos se encuentran en Canarias (tierra donde se ha criado Ivana) derrochando amor por cada esquina... ¡Y por cada playa!
La joven ha querido callar bocas, una vez más, y le ha escrito un romántico mensaje a su chico para dejar constancia que sus sentimientos son muy fuertes.
“Se quedan cortas las palabras realmente… Y a Dios le doy gracias porque estás aquí presente. Quiero que sepas que te amo eternamente”, ha escrito Ivana en su perfil oficial de Instagram junto a una imagen en la que salen de lo más acaramelados.
Hugo ha reaccionado a la publicación que ha compartido su chica y le ha respondido de la mejor manera posible: “Y esto recién empieza que lo sepas mi vida”. También Ana María Aldón, su compañera en Honduras, se ha dejado caer por los comentarios y les ha confesado lo mucho que les quiere a los dos: "Preciosa foto, os quiero".
El gran sacrificio de Ivana
La hermana de Mauro Icardi ha hecho un enorme 'sacrificio' para hacer feliz al ex de Adara Molinero. Han ido a pasar con Martín, el hijo de Sierra con la ganadora de 'GH VIP 7', el día a la Playa del Inglés, uno de los sitios preferidos de Hugo pero la verdad de todo esto es que hay que darse una buena caminata para poder acceder al lugar.
Ivana, cansada, ha querido explicar (mientras Hugo le grababa) toda la odisea: "¿Cuánto caminaste para llegar a la playa mi amor?", le ha preguntado de risas el ganador de 'GH Revolution'.
"Después de 250 millones de kilómetros, dunita arriba, dunita abajo, quemándome las piernas solo para que mi amor pudiese ver esta playa", le ha contestado en tono burlón mientras se escucha de fondo corretear al pequeño.