Caerá mejor o caerá peor. Se la tildará de soberbia, de antigua, de manipuladora –eso lo dijo Colate–, pero lo que hay que reconocerle a Isabel Pantoja es que desprende algo que hipnotiza. Ella sabe cómo meterse al público en el bolsillo, aunque esa facilidad para ganarse adeptos la tiene también para fabricarse enemigos. Sea como fuere, Isabel fue la auténtica estrella de la fiesta de despedida de 'Supervivientes' que se celebró en la noche del viernes en la discoteca 'Oh My Club', gestionada por Kiko Matamoros y sus socios, y en la que trabajan Alejandra Rubio y su novio, Álvaro.
Como suele suceder en las fiestas de fin de curso de 'SV' no falta casi nadie. Hubo ausencias, claro que sí, como la de Carlos Lozano, pero por allí estuvieron casi todos los participantes de este año. El ganador, Omar Montes, aún no había bajado de la nube. Seguramente, entre la final, la adrenalina a tope, la fiesta, ver a la familia, estar con su hijo, comer –sobre todo, comer–... ¿le quedó tiempo para dormir algo? Es muy posible que no. A Omar se le veía todavía aturdido, pero feliz.
Por allí vimos al otro finalista, Albert Álvarez, a Violeta y Fabio, muy tiernos el uno con el otro, a Mahi y Rafa, su novio, a Mónica Hoyos, y, cómo no, a Chelo y su mujer, a Colate, a Dakota... Y también a tertulianos y colaboradores que cómo se van a perder ellos una fiesta. Por supuesto, Lydia Lozano, Sofía Cristo, Miriam Saavedra... También vimos a Kiko Jiménez, que no posó con Sofía Suescun, y eso que esta era una de las maestras de ceremonias de la fiesta.
El apoteosis llegó cuando Isabel Pantoja se subió a escenario. Allí cantó el 'Así fue', la canción que le compuso Juan Gabriel, el mexicano que, según explicó la propia Pantoja, le pidió en matrimonio y ella se arrepintió de no haber aceptado su propuesta. Isabel, además, felicitó a todos sus compañeros por el mérito de haber participado en la edición más vista de 'Supervivientes'.