La Navidad suele ser época de reencuentros menos para la familia Pantoja. Así lo ha confirmado la propia Isa Pantoja (28 años) después de pasar la Nochebuena más lejos que nunca de su madre y su hermano. La joven retomaba su trabajo como colaboradora en el programa 'Vamos a ver' y confesaba que ni había recibido un mensaje de su madre ni tampoco lo esperaba.
Cabe recordar que Isabel Pantoja (67 años) fue la gran ausente de la boda de Isa y Asraf el pasado mes de octubre, una desaparición que confirmó que madre e hija llevaban meses sin hablar. Cansada de luchar por mantener ese vínculo con la tonadillera, la joven ha tomado una drástica decisión que marcará un antes y un después. "Ya estoy en otro momento... Yo tengo un hijo y voy a mirar por él y por mi familia, la que yo he formado (...) Ya no pienso saltar la valla de Cantora nunca más", advertía al tiempo que confesaba que el teléfono de su madre está fuera de servicio desde hace meses.
A pesar de esto, Isa Pantoja no puede evitar desear que pronto le llegue ese ansiado mensaje por parte de su madre, a la que adora a pesar de todo. "Estoy muy contenta y muy feliz pero sí que espero un mensaje de mi madre (...) Yo la quiero mucho porque es mi madre, pero yo ya no voy a llamarla y tampoco pienso volver a saltar la valla", sentenciaba.
La primera Navidad como casados de Isa Pantoja y Asraf
Isa Pantoja ha pasado estos días junto a Asraf y su hijo Alberto. Por su cultura, Asraf nunca celebra la Navidad, de ahí que para la colaboradora sea mucho más fácil organizarlo todo. La Nochebuena la pasaron en Madrid junto a un grupo de amigos y aunque en un principio iban a recibir el año en Canarias junto a Anabel Pantoja finalmente no será así. Tal y como ella ha confesado a Joaquín Prat, en Nochevieja estarán en el Puerto de Santa María con Dulce y Alberto.
Isabel Pantoja llega en vuelo privado a Madrid
Isabel Pantoja ha abandonado su refugio en Cantora en plena Navidad para hacer frente a sus compromisos profesionales. Arropada por su hermano Agustín y ajena por completo a las recientes acusaciones de Francisco Rivera, la artista llegaba a Madrid en vuelo privado para iniciar los ensayos del concierto que dará el próximo 30 de diciembre en el Palau Sant Jordi de Barcelona.
Su reaparición también ha coincidido con la venta de su ático de Fuengirola por 200.000 euros. Tal y como ha publicado la revista Lecturas en exclusiva, los problemas económicos han obligado a la tonadillera a deshacerse de gran parte de su patrimonio para hacer frente a su deuda con la Agencia Tributaria.