Darling Arrieta está totalmente desaparecida desde que se sentara en el plató de televisión de TVE de 'Mañaneros'. Fue una entrevista muy sentida y demoledora en el que la hermana de Edwin Arrieta llegó a hacer un llamamiento en directo a los padres del supuesto asesino de su hermano. Desde ese momento el silencio por su parte ha sido total y hasta inquietante. ¿Qué ha pasado con la hermana de Edwin Arrieta?
Darling Arrieta se mantiene en completo silencio en sus redes sociales, no ha hecho más declaraciones y está centrada en cuidar a su familia ante tanto dolor, sobre todo en sus padres que son muy mayores y que echan mucho de menos a su hijo. "Les diría a sus padres [Rodolfo Sancho y Silvia Bronchalo] que se acuerden que al otro lado del charco hay unos padres hipertensos, sufriendo aún más. Porque mi padre se despidió de mi hermano y no lo volverá a ver, ellos pueden volver a escuchar la voz de su hijo, le pueden ver. Nosotros no", dijo Darling Arrieta en su última entrevista en televisión.
La familia del doctor Arrieta se mantiene en silencio a la espera de que la justicia siga su curso. Sus peticiones sobre la memoria de Edwin siempre han sido respetar su imagen y que caiga todo el peso sobre la persona que acabó presuntamente con su vida, Daniel Sancho. Darling volvió a Colombia para estar junto a sus padres y su hija, un gran apoyo en estos momentos tan complicados, y ha tomado la determinación de alejarse del foco mediático para no entorpecer el trabajo de la policía. Ni siquiera han hablado en un momento clave del caso, y es que esta semana Daniel Sancho tenía su primer cara a cara con el juez -encuentro que se ha pospuesto por la petición del chef español- y Rodolfo Sancho se encuentra en Tailandia.
El ofrecimiento 'sin respuesta' de Darling Arrieta a los padres de Daniel Sancho
Darling aprovechó su entrevista en un plató de televisión de España, frente a Jaime Cantizano, para tender una mano a Rodolfo Sancho y Silvia Bronchalo: "Si ellos vienen a Colombia nosotros les recibimos, porque ellos son unos papás que están sufriendo como lo están haciendo los míos. Si ellos quieren ir a Lorica, no tenemos ningún problema con eso". Estas palabras de Darling llegaban después de que Rodolfo Sancho les mostrara sus condolencias (tanto en un comunicado como durante sus primeras declaraciones en su primera visita a Colombia) y de que Silvia Bronchalo afirmara que su deseo era hablar con ellos personalmente.
No sabemos si en estas semanas tan duras para ambas familias ha habido algún tipo de contacto o esperan a que la justicia tailandesa dicte sentencia con Daniel Sancho pero lo que sí es seguro es que ese encuentro personal entre los Arrieta y los Sancho no se ha producido por el momento.
"La verdad, no sabía que existía ni cómo era, ni cómo es ahora. No sé si lo que está diciendo es verdad o mentira. Solo él y Dios lo sabrá. Si lo primero que dice es por el momento, por el dolor, o si después está arrepentido, porque es de humanos equivocarse", dijo Darling sobre la primera actitud desafiante de Rodolfo Sancho con el que, a pesar de todo, empatiza y querría conocer.
Darling y Edwin Arrieta, muy unidos
La hermana del cirujano colombiano siempre ha destacado la unión que tenían como hermanos. En alguna de sus entrevistas confesaba que Edwin era el menor pero que en la mayoría de ocasiones parecía el mayor por la serenidad y madurez que tenía, siendo un total apoyo para ella durante su vida. De hecho, esta unión fue la que le llevó a sospechar de que algo estaba sucediendo en Tailandia al no tener noticias de su hermano, puesto que hablaban varias veces al día.
“Nosotros estábamos muy unidos, siempre hablábamos cuatro veces al día. Hablamos de las cosas de la familia, nos preguntábamos por mis padres, mi hija... Nunca hablábamos de la amistad, el hecho de que mi hermano fuera a España o Tailandia no era porque a él le gustaba viajar”, declaraba. Sobre el viaje al país del sudeste asiático revelaba que “era la primera vez que viajaba a Tailandia, pero no se nos hizo raro porque a él le encantaba viajar. Quería conocer el mundo. No nos explicó nada. Cuando llegó a Bangkok me dijo que era una ciudad muy linda y que había visto vestidos muy lindos para mi niña. Esa fue la última vez que hablé con él”.