Cuando Edwin Arrieta (44 años) dejo de contestar a las llamadas y mensajes, sus familiares y amigos empezaron a preocuparse por él. La primera persona a la que contactaron fue Daniel Sancho (29 años) después de que Darling, la hermana de Edwin, lo encontrara por redes sociales. Ella habló con el hijo de Rodolfo Sancho (48 años) que le aseguró que había perdido la pista al cirujano. Sin embargo, no fue la única. Vivian, amiga íntima de Arrieta, también conversó con el chef, dando lugar a un intercambio de lo más inquietante.
Vivian se puso en contacto con Daniel a petición de Darling, para lograr que el joven les ayudara a localizar a Edwin. Esta conversación habría tenido lugar cuando el hijo de Rodolfo ya habría cometido el asesinato y descuartizamiento y había acudido a comisaria a denunciar la desaparición del colombiano.
"¿Ya fuiste?", le preguntó Vivian, refiriéndose a si había hablado con la policía, a lo que Daniel contestó algo inesperado: "Me tienen retenido haciéndome muchas preguntas". Vivian, que aún no podía adivinar los derroteros que tomaría el caso, se mostró sorprendida por la retención de Daniel y volvió a preguntar por Edwin.
Era entonces cuando Daniel daba una contestación la mar de inquietante. "No sé que decirte, solo sé que espero que esté bien. Me tienen retenido, literalmente, toda la policía de Ko Phan Ngan", explicó el chef. Si de verdad es cierto lo que el mismo confesó, esta frase la habría pronunciado tras haber asesinado y desmembrado a Edwin. Daniel ya sabría que el cirujano estaba muerto cuando le dijo a Vivian que esperaba que estuviera bien.
La amiga de Edwin, sin creerse nada de lo que estaba pasando, y quiso saber qué había pasado. Era entonces cuando Sancho aseguró que esa gente le estaba dando miedo. Vivian intentó tranquilizarle y volvió a insistir por su amigo: "¿Dónde dejó Edwin el equipaje, la maleta y las cosas de él?". Daniel aseguraba no saber nada porque no se habían quedado en el mismo hotel.
La frase que Daniel Sancho envió a sus amigos
Muchas son las incógnitas que envuelven al caso Daniel Sancho, en prisión preventiva en la prisión de Koh Samui, en Tailandia, tras confesar el asesinato y posterior desmembramiento del cirujano colombiano Edwin Arrieta. Pese a que, desde el primer momento, hemos conocido casi al minuto todo lo que aconteció desde que Daniel llegó a Tailandia, no es menos cierto que a raíz de todo lo que está trascendiendo cada vez son más los interrogantes que se nos plantean. Por ejemplo, la inquietante frase que el hijo de Rodolfo Sancho envió a sus amigos antes de entrar en prisión: "Siento que estéis teniendo que ser de esas personas que sufren esto. Me estaba amenazando tanto a mí como a mi familia. Algún día sabréis toda la verdad".
¿Ha explicado Daniel toda la verdad?
Ese "algún día sabréis toda la verdad" solo puede entenderse como que, hasta el momento, no conocemos lo que realmente pasó entre Daniel Sancho y su víctima, Edwin Arrieta, o qué se esconde detrás de esa amistad o relación sentimental que le unía al cirujano colombiano. Es posible que Daniel haya contado solo lo que, a tenor de las pruebas que lo incriminan, explique su atroz crimen, pero parece que no lo ha contado todo, al menos a la policía, a sus amigos o a los medios. Quizá esa verdad que aún no conocemos solo la sepan ahora sus abogados y se incluyan en su estrategia de defensa.
Daniel Sancho, hasta su ingreso en prisión, ha tenido en su poder su móvil, de modo que ha podido contactar con familiares, amigos y hasta con periodistas, a quienes, a medida que pasaban los días, ha ido expresando sus miedos ante la situación en la que se encuentra.
La pregunta que hizo Daniel Sancho al juez
Desde el primer momento hemos podido conocer que el autor confeso del crimen al médico colombiano había hecho una extraña pregunta tanto al juez como a las personas con las que había mantenido contacto. El chef se preguntaba si su caso estaba siendo mediático, algo que ya nos habían indicado en anteriores comparecencias los encargados del caso en Tailandia y los portavoces de la familia en España.
Ahora se ha conocido que también se habría interesado en exceso por conocer si el tiempo que está pasando en la prisión de Koh Samui le terminaría restando días a su condena final, una vez que la sentencia sea firme por parte de la fiscalía tailandesa. Esta pregunta tendría sentido en el caso de que no se le condenase a pena de muerte, tal y como ha pedido la policía, ya que si la resolución es distinta, Daniel podría pasar ocho años en las cárceles del país asiático para después poder conmutar la pena en nuestro país, algo que le acabaría restando días.