Íñigo Onieva disfruta de un planazo ajeno a las palabras de Tamara Falcó sobre su boda

La vuelta a la rutina implica retomar las obligaciones, los compromisos profesionales y las costumbres. Que Íñigo Onieva (34 años) es un amante del buen comer no es ningún secreto. Una pasión por la gastronomía que comparte con su recién estrenada mujer. Pues bien, de vuelta a Instagram, el nuevo marqués de Griñón ha deleitado a sus 148.000 seguidores con una batería de imágenes de lo que ha sido su última experiencia gastronómica, un planazo que ha vivido sin Tamara Falcó (41 años).

Mientras la colaboradora participaba como cada jueves en 'El Hormiguero', su marido estaba disfrutando de una cena a todo dar en el lujoso restaurante Bistronomika, situado en el centro de Madrid. Se trata de un local en el que no existe carta porque se juega con la temporalidad, "solo tienes que dejarte sorprender", apuntan. Entre los múltiples platos que degustaron cabe destacar un enorme salmonete, ostras en tempura, un calamar a la brasa y una gran selección de postres caseros. 

Íñigo Onieva disfruta de una comida con amigos

Los planes del matrimonio por separado justifican las últimas declaraciones que Tamara hizo tras su regreso de la luna de miel, y es que a pesar de los antecedentes de su marido, ella ha perdonado a Íñigo con todas las consecuencias y ambos cuentan con la misma libertad para hacer y deshacer en función de sus necesidades y gustos. 

Tamara Falcó habla del desconocido percance que casi arruina su look nupcial

Al mismo tiempo que Íñigo disfrutaba de esta velada informal, Tamara Falcó volvía a hablar de su boda. Más concretamente del pequeño percance que ocurrió horas antes del gran día y que casi le lleva a ir sin zapatos a su propia boda. Hasta ahora conocíamos que la sotana del sacerdote casi se prende fuego si no llega a ser por Alejandra Onieva, pues bien la protagonista ha contado ahora que se quedó sin zapatos para acudir al altar. "Fue una carrera de obstáculos", aseguró la hija de Isabel Preysler en tono jocoso. "Me dijeron que el camión que transportaba mis zapatos de novia desde Valencia había explotado, incinerándose el 65% del transporte, y ahí estaban los míos", contaba Tamara ante la sorpresa de sus compañeros. Lejos de entrar en dramatismo, la novia fue rotunda: "Ponerme otros". Y así fue, después de meses para elegirlos, finalmente la joven llevó otros diferentes. 

Íñigo Onieva perdió un hermano cuando era solo un niño

Cuando pensábamos que lo sabíamos todo sobre el marido de Tamara Falcó ha sido Carolina Molas, madre de Íñigo, quien ha contado en una entrevista exclusiva a la revista Forbes que perdió a un hijo siendo solo un niño. Un episodio muy duro que marcó su vida para siempre. "A los 25 años tenía cuatro hijos. Uno de ellos falleció de meningitis a los 7 años", recordaba. Aunque no oculta que fueron años muy difíciles para todos, el tiempo ha conseguido curar esa herida: "Lo tenemos aceptado, aunque costó". 

La inminente mudanza de Tamara Falcó e Íñigo Onieva 

Será este otoño cuando Tamara Falcó e Íñigo Onieva estrenen el lujoso ático que la marquesa de Griñón compró en 2020 en la exclusiva urbanización Puerta de Hierro por 1,5 millones de euros. Una casa de más de 200 metros cuadrados que se encuentra a escasos 5 minutos de la de Isabel Preysler.

Aunque se trata de una vivienda de obra nueva, nada más recibir las llaves Tamara contrató a la interiorista Beatriz Silveira para transformar por completo el espacio y convertirla en la casa de sus sueños, una reforma integral que ya ha llegado a su fin. Según publicó en exclusiva Vanitatis, la marquesa de Griñón está "encantada" con el resultado y no ve el momento de mudarse junto a su marido a este imponente piso de cuatro habitaciones, tres baños, cocina gourmet y una gran terraza con vistas a la ciudad.