En la Casa de Alba ya cuentan los días para ser uno más en la familia, Carlos Fitz James Stuart y Solís y Belén Corsini están a punto de dar la bienvenida a su primer hijo en común. La joven, que ya confirmó que están esperando un niño, ha llevado su embarazo con la discreción que les caracteriza, pero sin ocultar su ilusión, ni mucho menos su barriguita, pues ha estado haciendo vida completamente normal y no hace mucho se publicaron unas imágenes en las que se le podía ver paseando en familia a su perrito y disfrutando de las calles de Madrid con toda tranquilidad.
Se desconoce si también ha trabajado hasta el último momento, pero es muy probable, pues se dedica sobre todo a gestionar las empresas familiares, lo que no quiere un enorme esfuerzo físico, aunque si preparación y dedicación. Y es que, al margen de su título de condesa de Osorno, que lleva con gran honor, y de las empresas y riquezas vinculadas a la Casa de Alba, a la que pertenece su marido, ella ya llevaba años preparándose para tomar partido en el conglomerado empresarial de La Tribu, que es como se conoce entre la aristocracia financiera a su familia. Su padre, Juan Carlos Corsini Muñoz de Rivera, siempre ha sido muy respetado por su buen hacer en los negocios, que en parte heredó del abuelo de Belén, Carlos Corsini Sanespleda. Un emporio en el que poco a poco, la juventud, va ganando posiciones.
De hecho, en este enero de 2024, ha pasado a manos de la gestión única de Belén y su hermano, Francisco de Borja, una sociedad que hasta el momento estaba en manos de su progenitor, Montes Valbueno SL. Se trata de una entidad dedicada, como la mayoría de las de la familia, a la agricultura, tiene 13 años de antigüedad y se dio de alta con 7 millones de euros. Y no es ni mucho menos la única que consta a nombre de la futura mamá, pues ocupa diez cargos repartidos en tres entidades diferentes.
Es consejera, vicesecretaria y presidenta de ‘Agrupación Promotora Rivas Leganés SA’, dedicada al alquiler de bienes inmobiliarios por cuenta propia desde 1987, que inició su actividad con 3,8 millones de euros y que hoy mantiene una cifra ligeramente superior, 4 millones, como valor total. Ella comenzó a formar parte del órgano administrativo de la entidad en 2016. Casi a la vez lo hizo en Granja TC del Jarama SA, el otro buque insignia de la familia, sociedad en la que tras la última junta se le ha nombrado secretaria, pero en la que antes ocupaba los cargos de consejera y vicesecretaria. Esta empresa se dedica a la agricultura en general, tal como se detalla en el Registro Mercantil y su facturación en el último año que es posible consultar fue superó por poco el medio millón de euros.
Por primera vez también en este año forma parte de Alquicor Gestión SL, dedicada al alquiler de bienes inmobiliarios. Se dio de alta en 2006 y en la actualidad Belén es la única administradora de la sociedad que desde 2019 no presenta cuentas. Dados los recientes cambios en el órgano administrativo y su aparente escasa actividad en los últimos años, parece que Corsini haya tomado las riendas con la intención de revivir esta entidad o de hacer los cambios pertinentes para dedicarla a otra actividad, pero su nombramiento no es, seguro, en vano.
La condesa de Osorno es un valor fundamental de su familia, y su buena mano en los negocios, además de la buena posición que le viene impuesta desde la cuna, le aseguran a ese bebé que está a punto de nacer un futuro tan próspero, que podría decirse que está casi solucionado, y todo ello sin contar con la fortuna y el trabajo del padre, pues Carlos Fitz James comparte con su mujer ambas cualidades y también se ha formado durante años para saber gestionar su legado.