Álex Lequio: el gesto de complicidad con el hermano de María Palacios mientras ambos luchaban contra la enfermedad

El hijo de Ana Obregón y Alessandro Lequio quiso tener un bonito detalle con Borja en su cuenta de Instagram

Álex Lequio María Palacios hermano

Álex Lequio nunca estuvo solo durante los dos años que luchó contra el cáncer que padecía. Además del apoyo incansable de sus padres, quienes no se separaron de él hasta su último suspiro, el joven vivió este duro camino junto a Borja Palacios. El hermano pequeño de María Palacios y cuñado de Alessandro Lequio está haciendo frente a una complicada enfermedad de la que está recibiendo tratamiento médico. Unos duros momentos en el que ambos, que mantenían una relación muy cercana, se mantuvieron unidos. Tanto, que Álex quiso tener un bonito detalle con él semanas antes de su muerte.

Álex Lequio compartió hace poco más de dos meses, el pasado 25 de marzo, una fotografía en sus redes sociales que había pasado desapercibida hasta este momento. En ella, el joven tenía un guiño con Borja que ahora ha cobrado todo el sentido. En la fotografía aparecen Son Goku y Vegeta, protagonistas de ‘Bola de Dragón, a punto de materializar su gran poder. La fusión entre ambos se llevaba a cabo en la ficción para luchar con fuerza y destruir al villano.

Ready @borjapmilla #BlancoPequeño #ErrorPequeño

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En la instantánea que compartió Álex Lequio, Son Goku y Vegata plantan cara juntos y en solitario a todos los superhéroes de la historia del cómic. Una clara metáfora del duro momento al que ambos estaban haciendo frente pero al que pensaban plantar cara hasta el final. “Ready” (“Listos”), fue el comentario del joven junto a la ilustración, en la que etiquetó al hermano pequeño de María Palacios en Vegeta.

La respuesta de Borja no pudo ser más ilustrativa entonces. El joven añadió tres emoticonos exhibiendo bíceps, a lo que Álex contestó: “Vamos a ir a por ellos, chico. Esta mierda no nos va a joder”. Para concluir, el hermano de María Palacios sentenció: “Nos llaman meningitis… Al que no matamos, lo dejamos tonto”. Una conversación de la que se deduce la excelente relación que existía entre ambos, quienes se apoyaron mutuamente en todo momento.