La hija de Paz Padilla, Anna Ferrer, tuvo que ir al psicólogo de niña tras la separación de sus padres

La joven influencer sufre ansiedad desde hace tiempo y por ello ha tenido que recibir ayuda de profesionales, una terapia que ya tuvo que recibir de niña por un asunto muy personal

Anna Ferrer

Anna Ferrer Padilla ha vuelto a poner sobre la mesa su problema de ansiedad, una enfermedad que sufre desde hace más de un año y que ella tiene normalizada. Además de reencontrarse a ella misma y de refugiarse en los suyos la joven no ha dudado en compartir más de una vez que tiene que recibir ayuda psicológica.

"Estoy hiper agotada en un nivel de intensidad que no os lo imagináis. Solo vengo a deciros que hoy, entre las muchas cosas que he hecho, he ido al psicólogo. ¿Y qué? ¡Pues voy al psicólogo! Quería contároslo porque hay que normalizarlo ya que a veces está mal visto", contó la hija de Paz Padilla en stories hace unos meses.

Anna Ferrer

Pues bien, con motivo del Día de las Enfermedades Mentales, la influencer ha vuelto a hablar de su ansiedad en Instagram invitando a los que la escuchen a pedir ayuda cuando lo necesiten sin ningún tipo de miedo. Anna ha hablado abiertamente en stories de su ansiedad y de la terapia que recibe, una ayuda profesional que no era desconocida para ella.

Así, la joven ha hecho una de sus revelaciones más personales: "Ya fui de pequeña cuando mis padres se separaron". Anna recibió ayuda cuando Albert Ferrer y Paz Padilla pusieron punto y final a su relación en 2003, cuando ella tenía 6 añitos.

Paz Padilla y Anna Ferrer

Un tema del que hoy, ya una mujer, habla sin problema alguno, y que mejor aún le ha enseñado a normalizar algo tan positivo como recurrir a los profesionales cada vez que sea necesario. Anna lo pasó mal cuando sus padres se separaron pero ahora está feliz y lo lleva genial.

"Claro que tengo relación con mi padre, me llevo muy bien con él, lo que pasa que no vive en Madrid y no publico muchas cosas con él. Parece que si no contesto es porque nos llevamos mal pero para nada. Con mi madre se lleva genial", dijo hace un año.