Ha sido el desenlace más triste. Esta misma mañana se encontraba el cuerpo sin vida de Blanca Fernández Ochoa. Cerca de mediodía, la agencia Efe confirmaba que el cuerpo hallado durante la búsqueda era el de la deportista. Por el momento, no han trascendido detalles de las causas del fallecimiento. La noticia ha supuesto un durísimo golpe para sus seres queridos y familiares, así como para todos los que guardaban un enorme cariño hacia la esquiadora.
Este miércoles de septiembre se reanuda la búsqueda de la esquiadora Blanca Fernández Ochoa, de 56 años, que lleva ya once días desaparecida. Sobre mediodía se informaba en Telecinco de que la unidad canina que había hallado un cuerpo de mujer por la unidad canina en el parque natural de las Dehesas.
Después de la infructífera y desoladora jornada de ayer, en la que tampoco se encontró ninguna pista ni rastro sobre su paradero, se ha abierto una nueva vía de investigación que ha iniciado una nueva búsqueda, esta vez en el interior de los embalses. Tal como informa El Mundo, los GEAS, el Grupo de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil, se encuentra ya trabajando en los embalses de Berceas y Navalmedio.
En el cuarto día de búsqueda, se ha añadido esta nueva localización a la zona de Siete Picos, donde están peinando los senderos que solía frecuentar. Siempre con la misma hipótesis principal en mente: que Blanca sufriera un accidente en esta zona del monte que solía frecuentar y que, por lo tanto, conocía bastante bien. Asimismo, se ha apuntado que la deportista pudo salir de casa con saco de dormir y víveres (además del queso que compró en una parada que hizo en el centro comercial de Pozuelo).
La falta de noticias del paradero de Blanca Fernández Ochoa está minando la esperanza de sus familiares y amigos. El amplio dispositivo de búsqueda compuesto por 400 personas solo ha podido dar una respuesta clara: no hay rastro de la esquiadora. Después del falso positivo de los perros de rastreo, en la mañana del 3 de septiembre se han incorporado siete drones por la zona que precisamente Dolores Fernández Ochoa, hermana de la desaparecida, ha marcado como el lugar donde podrían encontrarla. Su sobrina Paula tiene una teoría: cree que ha sufrido un accidente.
Esa ubicación es Siete Picos, un lugar muy localizado de la sierra madrileña. A pesar de estar en una lucha contra el tiempo, Dolores, que confesaba estar "un poquito más desanimada", sigue guardando la esperanza de encontrar a su hermana allí "entre hoy y mañana, si es que está bien".
"Hoy ya me he desmoralizado un poco, porque me he dado cuenta la dimensión tan grande que tiene el monte", verbalizaba con angustia. Los pensamientos de Lola no van desencaminados pues, todos los indicios apuntan a que "Blanca está en el monte". Asimismo, muchas de las líneas de investigación (había hasta ocho abiertas) se han cerrado, centrando la investigación y la búsqueda principal en la sierra, y descartando las afueras de la Comunidad de Madrid e incluso de otras partes del país.
Ayer, justo después de visitar el lugar de la desaparición junto a su hermano, su hija Olivia tomó una decisión muy importante. La joven se incorporaba a la concentración de la Selección española femenina de rugby seven para mantenerse al margen de la presión mediática mientras espera noticias de su madre.
"La jugadora del CR Cisneros se ha incorporado esta tarde a la concentración por decisión propia y con el apoyo de su padre, David Fresneda", señala el comunicado emitido por la Federación Española de Rugby.
El texto deja claro que la jugadora estará en contacto directo con su familia en todo momento: "A la espera de recibir noticias sobre el paradero de su madre, a quien esperamos y deseamos que se localice lo antes posible y con un desenlace feliz, Olivia sigue y seguirá en contacto directo con su familia, además de con los responsables del operativo de búsqueda por si en cualquier momento su colaboración fuera necesaria".
Finalmente, el comunicado pide "el máximo respeto a la intimidad de Olivia, quien lógicamente está pasando unos momentos muy difíciles".