La familia de la cantante colombiana está atravesando un momento de lo más complicado. Y es que Lucila Mebarak, hermanastra de la cantante, ha dejado a su marido después de, supuestamente, hacerle perder una gran cantidad de dinero y huir a su país natal previo paso por Barcelona.
La situación ha sido de lo más peliaguda. La hermanastra de Shakira, Lucila es neurocirujana y estaba felizmente casada con su constructor. Ambos habían comprado una lujosa casa en Tenerife de seis habitaciones y seis cuartos de baño con un valor de más de un millón de euros.
Según el abogado de Roberto García Barreto, el excuñado de Shakira, Lucila le habría convencido para hacer varias inversiones y ponerlas todas a nombre de ella. Ahora, Lucila le ha dejado con una enorme deuda después de romper con él.
Parece que primero pasó por Barcelona, donde vive Shakira con su familia y después puso rumbo a su ciudad natal, Barranquilla, en Colombia aunque se desconoce su paradero exacto. El 23 de mayo había una orden para proceder al desahucio de Roberto de su chalet de lujo pero de momento ha quedado paralizada ya que el constructor, con una incapacidad médica, no tiene otro lugar al que ir.
Roberto también denuncia que ha recibido amenazas por parte de la familia de la cantante, en concreto de William Mebarak, padre de Shakira y de Lucila. Por otro lado, la propia Shakira también está viviendo un momento complicado en el plano legal. La Fiscalía de Barcelona ha decidido seguir investigando su supuesto fraude fiscal cometido entre 2011 y 2014 y por el que ya ha pagado 20 millones de euros correspondientes al primer año de deuda con Hacienda.