Sheila Casas (35 años) ha sorprendido a sus seguidores con una dura noticia sobre su salud. La hermana de Mario Casas (37 años), que se ha tomado con mucho humor lo sucedido, ha tenido que ser ingresada en el hospital.
La influencer ha compartido a través de sus redes sociales cómo ha sido su llegada al hospital, desde donde ha explicado cómo se siente y cómo está evolucionando después de haber tenido que quedarse por algunos dolores que no le permitían hacer su vida con normalidad. Una situación imprevista en la que le están haciendo los correspondientes controles y pruebas.
Sheila Casas, ingresada
"Descartando cosas graves", ha escrito en sus redes sociales la influencer, que sabe que debe quedarse unos días en el hospital para que los médicos vean de dónde se originan los dolores, por lo que le queda un poco porque sigue esperando "los resultados de algunas pruebas". Por el momento no se conoce el diagnóstico, pero ella misma ha confesado que cree que puede ser una inflamación del hígado. Eso sí, aunque la incertidumbre inunde sus días, la hermana del intérprete de 'Bird Box' ha preferido ponerle buena cara al mal tiempo: "Realmente me han cogido cariño. No quieren que me vaya y no saben cómo hacerlo", ha bromeado desde su habitación del hospital, donde parece llevar un dieta estricta y blanda que se limita a pollo cocido con verduras y similares. "Aún faltan resultados" ha escrito.
![El desayuno de Sheila Casas](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 1200 1614"%3E%3C/svg%3E)
El desayuno soñado de Sheila Casas.
En estos largos momentos que se viven desde la habitación de un hospital, la también actriz ha recibido varias visitas que le han alegrado la estancia. Y aunque no se sabe sin han ido sus hermanos, sus amigos o una posible pareja, lo que sí es que alguien le ha regalado un peluche. "He ligado", ha bromeado Sheila, que además ha expresado que echa mucho de menos los desayunos que se hace en casa. Sobre todo las tostadas con aguacate, ya que en el centro médico le están dando tés, leche y biscottes (algo bastante poco apetecible). "Buenos días, soñando con la tostada del otro día", ha escrito.