Después de meses de rumores e infinidad de tiras y aflojas entre Sergio Ramos y el Real Madrid, el club anunciaba el adiós del defensa tras más de 15 años en sus filas. En la mañana de este jueves, el sevillano se despedía entre lágrimas del equipo de su vida: "Nada será como lo que he vivido aquí", apuntaba sin poder evitar romper a llorar.

Desde la primera fila, Pilar Rubio y sus cuatros hijos: Sergio, Marco, Alejandro y Máximo Adriano, no han querido faltar para mostrarle todo su apoyo en el que ha sido uno de los momentos más difíciles de su carrera: "Llegué de la mano de mis padres y mis hermanos siendo un niño y, ahora tengo una gran familia. Quiero agradecerles a ellos, que siempre han estado conmigo", decía con la voz entrecortada.