Tras el paseo en barco por el rio Ij, en el que los reyes de Holanda junto a sus hijas han recibido el calor de todos los holandeses, el moderno Muziekgebauw, el auditorio junto al río, acoge la gran cela de gala de clausura. Una cena ofrecida por el presidente del gobierno en nombre del Consejo Nacional de Ministros en honor a los nuevos soberanos
Se trata de la primera cena de gala de Máxima y Guillermo Alejandro como reyes. Una esperada cita en la que tendrán a su lado a sus tres hijas y a la ya princesa de Orange, Beatriz. A la cena asisten además de los miembros del gobierno y la familia real holandesa, todos los príncipes herederos que han participado en los distintos actos organizados para celebrar la coronación del nuevo rey holandés.
Unos de los primeros en llegar han sido los príncipes de Bélgica, Matilde y Felipe y los herederos noruegos, Haakon y Mette Marit. Tras ellos veíamos llegar a doña Letizia y don Felipe. La princesa de Asturias, elegantísima, apostaba de nuevo, como hacía para el acto de coronación y para la cena de gala ofrecida la noche anterior por la entonces reina Beatriz, por un diseño de Felipe Varela. Un vestido en azul noche de tirante cruzado que la princesa llevó en el 60 cumpleaños del príncipe Carlos de Inglaterra, en noviembre de 2008.
Una de las grandes ausentes, como la noche anterior, ha sido la princesa Masako de Japón, que sí acudió al acto de coronación.