Este verano será uno que la familia Goyanes jamás olvidará. En menos de un mes, los miembros de este clan han perdido a dos de los componentes de esta familia más queridos por todos ellos. Primero tuvimos la noticia, el pasado 7 de agosto, del fallecimiento de Carlos Goyanes, el padre de la familia, que sufría un infarto de miocardio que acababa con su vida a los 79 años de edad. Esto fue un duro golpe para su mujer y sus hijas, que no esperaban lo que el destino tenía guardado para ellas, ya que el 26 de agosto sucedía exactamente lo mismo a Caritina Goyanes, la hija mayor del matrimonio, que fallecía a los 46 años de lo misma manera que su padre. Tras estos horribles hechos, la familia decidió refugiarse unos días en una finca en Ciudad Real, donde se han apoyado mutuamente y han tomado una decisión muy importante para todos ellos.
La decisión más importante de la familia Goyanes
Algo que mucha gente se preguntaba después de este duro y difícil bache es cuando sería la fecha elegida por la familia para llevar a cabo el funeral en el que se despedirán de ambos familiares, un último adiós a padre e hija que todos ellos necesitan dar para poder seguir avanzando. Sin duda, será un momento muy difícil en el que van a necesitar apoyarse los unos a los otros más que nunca pero, en este retiro familiar que acaban de llevar a cabo parece que ya habrían tomado la decisión de ponerle fecha a este funeral conjunto para Carlos y Carla.
Según informa ‘Vanitatis’, Paloma Barrientos acaba de informar de que esta fecha estaría ya elegida, habiendo optado por dar un último adiós a los fallecidos el próximo 23 de septiembre. Ese día será especialmente duro para Cari Lapique, que acaba de perder en apenas 20 días a su marido y a una de sus hijas, por lo que el dolor que siente y sentirá en ese entierro será uno de los más intensos posibles. Junto a ella estará su otra hija, Carla Goyanes, que sin duda hará de pilar para su madre. El funeral se llevará a cabo en la Iglesia Parroquial de San Agustín, en Madrid, ya que, según comenta la citada periodista, Caritina tenía una gran relación con el párroco de la misma, don José María Muñoz de Juan, ya que la empresaria ha expresado en sus últimos años de vida como adoptó una efusiva y practicante fe católica, siendo una gran asidua a misa.
Además, en ese mismo artículo afirman que Caritina “acudía a charlas y oración del grupo denominado ‘mothers prayers’” ya que Goyanes “estaba muy implicada en la educación cristiana de sus hijos, y su mayor deseo era acercar a Dios a su familia y a todos los que tenía alrededor”, comentó en el pasado el sacerdote Carlos López.
La gran fe cristiana de Caritina Goyanes
Hablando con el citado medio hace tiempo, Caritina comentó muy abiertamente cómo empezó su fe: “Mi educación religiosa era de las que yo llamo de ‘cumple y miento’ (en vez de ‘cumplimiento’). Dios no era algo que estuviera en casa. Soy una persona que me he exigido mucho y llegué a un momento de mi vida de tensión personal y ansiedad muy grande. Aparentemente tenía todo, pero había algo que me generaba inseguridad e irritabilidad. No me aguantaba ni a mí misma. Hablaba mal a mi marido, a mis hijos, a los amigos... Hice terapia, mindfulness, leía libros de autoayuda y no me servía de mucho. Y resulta que me convenció un amigo para hacer el retiro de Emaús y me cambió la vida. Fue el mejor regalo que he recibido”, confirmaba.
Sin duda, esta educación cristiana que ha querido inculcar a sus hijos será algo que ahora puede que ayude a los niños, de 10 y 13 años, a superar la muerte de su madre, que seguro estaría orgullosa de la manera en la que sus seres queridos están organizando el que será su último y triste adiós.