Tres semanas después de vivir uno de los peores momentos de su vida, el torero Gonzalo Caballero por fin podrá volver a casa. El diestro ha recibido este miércoles 6 de noviembre el alta en el hospital San Francisco de Asís, en el que se encontraba desde el pasado 12 de octubre,
Acompañado de los médicos que le salvaron la vida, el diestro ha ofrecido una rueda de prensa en la que ha dado las gracias a todo el personal que lo ha atendido en estas duras semanas. Además, también ha hablado de los duros momentos que vivió tras la cornada que sufrió en la plaza de toros de Las Ventas.
“Se supone que los toreros tenemos que estar preparados, pero en el transcurso a la enfermería notaba cómo salía un grifo de sangre. Pedí que le dijeran a mi madre que la quería, sentía que se me iba la vida”, ha confesado el diestro, quien además, ha agradecido a las personas de su entorno todo el apoyo recibido.
“Las personas de mi entorno comenzaron a animarme. Ahí me di cuenta de que la vida se trata de caer y levantarse, de aprender, empecé a soñar con la tarde de mi reaparición”, ha afirmado. Caballero, por lo tanto, ha confirmado que volverá a los ruedos en cuanto pueda: “Lo voy a dar todo para volver el año que viene, ahora me toca ganar un gran número de batallas”.
Por su parte, los médicos han explicado que el joven continuará con su recuperación en casa y que no podrá volver a torear en dos o tres meses. “Fue angustioso porque vimos cómo la vida de una persona joven se podía ir”, ha afirmado el cirujano jefes de Las Ventas, Máximo García.
Gonzalo Caballero sufrió una grave cogida en la plaza de toros de Las Ventas el pasado 12 de octubre por la que tuvo que ser intervenido en dos ocasiones. En concreto, recibió una grave cornada en su ingle izquierda de la que primero fue operado de urgencia en la propia plaza y posteriormente en el hospital.