No falta nadie. Gloria Camila, José Fernando, José Ortega Cano y sí, también Rocío Jurado, pero ella desde en el marco de fotos localizado en medio de los tres, presente como ha estado desde que falleció hace ahora 9 años. En la cara de padre e hijos, una sonrisa sincera, abierta y natural. Los tres hacen el signo de la victoria porque han sabido sobreponerse a los malos tiempos, a las malas compañías del joven, sus delitos y adicciones, y al tiempo en prisión del padre. Gloria ha sido fuerte y este tiempo lo ha pasado como ha podido, apoyándose en sus amigos, su pareja, Juanki, y animada por el pequeñín de la casa, José Jr. Todos han vencido en algo y ahora no pueden estar más felices.
A pesar de que José Fernando sigue ingresado en la clínica López Ibor, donde recibe visitas y puede salir a reunirse con sus familiares, y que Ortega Cano está pendiente de recibir el tercer grado, padre e hijo miran con optimismo el futuro. Parece que las rencillas quedaron atrás y que este tiempo alejados les ha hecho darse cuenta de lo que de verdad importa, priorizar y aprender de sus errores.
Gloria Camila, como decimos, ha sido el testigo silencioso de todo. Apoyando a uno, apoyando a otro. A pesar de su juventud, la joven ha madurado a base de malas noticias, pero ni por esas la vida ha podido con ella. La hija de Rocío y Ortega le planta una sonrisa a los sinsabores y ha aprendido a crecerse frente a las adversidades, que no han sido pocas. Ahora, viendo a los hombres de su vida reunidos a su lado felices y pletóricos, seguro que no puede evitar acordarse de su madre, a la que siempre tiene muy presente, y pensar lo orgullosa que la haría verlos así de unidos.