'Gipsy Kings': La Rebe se lleva el disgusto de su vida por culpa de su padre

La protagonista del programa de Cuatro ha tomado la decisión de marcharse a Madrid, algo que a su padre no le ha hecho ninguna gracia y se lo ha hecho saber con un duro gesto

la rebe Gipsy Kings

La Rebe ha tomado una decisión que a su familia le ha costado mucho aceptar, pero ella tenía claro que pese al disgusto de sus padres, no iba a cambiar de idea. La protagonista de los ‘Gipsy Kings’ ha decidido abandonar el hogar familiar y poner rumbo a Madrid para independizarse. Como ya es mayor de edad, considera que la mejor forma de hacer una vida independiente y poder dar lo mejor a su hijo, es viajar hasta la ciudad en busca de trabajo. Cuando lo comunicó en casa a su familia no le hizo ninguna gracia, en especial a su padre. Con el carácter tan protector que le caracteriza, le hizo saber a su hija que no estaba de acuerdo con que se marchara y que era algo que le hacía sentir mucho miedo. Pero Rebeca le hizo saber que le daba igual su opinión y que estaba dispuesta a coger el autobús que le llevaría hasta Madrid.

Y dicho y hecho. La Rebe ha hecho las maletas para comenzar una nueva vida y ha protagonizado una emotiva despedida en la estación. Han sido varios los familiares que han ido a decirle adiós y desearle suerte en su nueva aventura. Entre ellos han estado su madre y su hijo, que se han mostrado muy tristes con su marcha. Además ella ha asegurado que “el momento más emotivo ha sido despedirme de mi hijo”. Pero… ¡De su padre no había ni rastro! Y esto es algo que ha disgustado muchísimo a la estrella del programa de Cuatro. Muy seria y al borde de las lágrimas, ha asegurado que “me ha dolido que mi padre no haya venido a despedirse. No me lo esperaba. No es para tanto”. Así que se ha llevado un gran disgusto a solo unos minutos de subir al autobús. Pero… ¡De repente la situación ha cambiado!

La Rebe

Finalmente su padre ha aparecido en la estación y ambos han protagonizado un momento de lo más emotivo. Se han fundido en un bonito abrazo y su papá incluso se ha mostrado arrepentido con su actitud y le ha pedido disculpas. “Te pido que me perdones por cómo te he hablado”, le ha dicho a su hija. Algo que a ella le ha servido mucho porque “me ha dado las alas para volar. Sin su consentimiento no me siento a gusto”.