Isabel Pantoja hizo anoche dos movimientos que muchos esperaban. Pese a la confianza de su hija Isa en que su madre asistiría a su debut musical, la tonadillera decidió quedarse en casa para no perderse la batalla de su sobrina Anabel para permanecer en ‘GH VIP’. De hecho, no dudó en levantar el teléfono para animar a la concursante y pedir el voto final de cara a su, sí, cercana expulsión. Los tiempos no parecen cambiar para la familia Pantoja, que se encuentra ya en plena y declarada ruptura.
Isa Pantoja no sabía si su madre iba a ir a verla en su debut musical ante prensa y amigos pero tenía confianza en que así iba a ser. La joven, muy ilusionada, no sabía bien del todo si la cantante estaría con ella arropándola, como tantas veces ha hecho con su hijo Kiko, pero guardaba esperanza. Una desilusión que todavía fue más fuerte, claro. Isa se quedó sin la presencia de nadie de su familia y no pudo evitar romperse.
Pantoja, mientras tanto, sí daba la cara por su sobrina Anabel. La ya exconcursante de ‘GH VIP' se encontraba en la cuerda floja ante la expulsión y no imaginaba que su tía iba a levantar el teléfono para apoyarla en el último momento. La tonadillera no dudaba en darlo todo por su sobrina mientras su hija presentaba su single en soledad. “Eres como mi hija mayor”, le decía a una Anabel muy emocionada.
Queda claro que la cantante, entre su sobrina y mano derecha durante mucho tiempo y su propia hija, ha elegido a la primera. Un apoyo expreso tanto en ‘Sálvame’ como ya directamente en la gala de ‘GH VIP’ que finalmente no servía de nada. Anabel se convertía en la primera expulsada del reality.