Gran Hermano ha empezado más fuerte que nunca, pero a pesar de que los concursantes llevan menos de una semana en la casa de Guadalix de la Sierra, ya nos va dejando momentazos de los buenos: peleas, ganas de querer abandonar y algún que otro acercamiento. Al comienzo del reality, uno de los focos más conflictivos se centraba en Adara Molinero y el maestro Joao, declarados enemigos públicos cuando el vidente comenzaba una relación amorosa con Pol Badía, ex pareja y ex compañero de concurso de Adara. Para sorpresa de todos, lo que parecía una bomba a punto de estallar se quedó en nada y ambos están conviviendo de la mejor manera posible.
Los concursantes están estrechando lazos y empiezan a conocerse más a fondo. Hugo Castejón, que tiene a todos sus compañeros en contra, le ha preguntado a Adara sobre el tema y si hay algún problema en cuanto a la presencia del actual novio de Pol: "Sinceramente me importa un bledo. Es más no puedo decirle nada porque me parto el culo con él", le ha contestado lo más sincera posible.
Unas palabras que constatan el buen rollo que hay entre ellos.
Ni Molinero ni Joao habían tenido la oportunidad de conocerse en persona, eso no quita que alguna ocasión se hayan mandado algún zasca que otro. Su reencuentro en GH VIP fue uno de los momentos más vistos por la audiencia y no dejaron pasar la oportunidad de dejarse las cosas claras: "Pol podría ser tu hijo", le reprochó la de Alcobendas. Comentario que a Joao no le gustó ningún pelo y no dudó en contraatacar: "Y tú estás con un señor mayor que podría ser tu padre".
El ex de Marta Sánchez ha querido seguir indagando y, también, le ha preguntado a Joao sobre ella y ha confesado que "para él no hay problema alguno en compartir casa y reality con la ex de su novio" y que "le cae bien Adara".
Pero GH no es como empieza es como acaba. Es normal que surjan rocecillos típicos de la convivencia, pero desde luego ellos lo están llevando a las mil maravillas. Tan buena es su relación (de momento) que incluso han estado cogiendo galletas a escondidas de los demás.
¿Cuánto les durará? ¿Han sellado la paz para siempre?